Saltillo, Coah.- A principios del siglo pasado, durante la Revolución mexicana, la casona blanca de Santa Anita sirvió como refugio para soldados. Ahora, 100 años después, es en cambio un espacio abierto a los talentos artísticos para que las armas no vuelvan a sonar en ella. Así, el Centro Cultural Santa Anita cumplió 45 años de conformar nuevas generaciones de creadores.

El edificio, que desde 1976 imparte talleres de Danza, Pintura, Piano, Teatro y demás, fue festejado el martes con una serie de actividades realizadas por los nuevos talentos, como por otros que ahí dieron sus primeros pasos. Pero sobre todo porque durante 2020 tuvo, al igual que todo el mundo, un receso por la pandemia de Covid-19.

Fue Ana Sofía García Camil, secretaria de Cultura (Sec), quien apuntó que “esta casa se convirtió en un semillero de diferentes artista que ahora están destacando en las disciplinas que se ven aquí”, además de felicitar a “los maestros por su gran esfuerzo de tener aquí esas disciplinas y mantenerlas. Ustedes han permanecido y han permitido que podamos estar celebrando estos 45 años”.

Así, el Centro Cultural Santa Anita cuenta con la dirección de Norma Lidia Malacara Valdez, y una plantilla docente conformada por Nemesio López Saucedo, de Danza Folklórica; Hilda Leticia Guzmán Vela, de Ballet Clásico; Febe Barrios Aguayo, de Piano; Francisco García García, de Teatro; Marlon Antonio Alonso Carrillo, de Música; Anabel Prado Moreno, de Artes Plásticas; Juan Manuel López Perales, “Don Meme”.

Por ello la titular de la Sec destacó “la entrega a la comunidad que se da aquí en Santa Anita. Se dice fácil, pero en este evento queremos reconocer todo el esfuerzo, dedicación y empeño de quienes han hecho posible a este lugar”.

Ritmo y color

Un sitio que ayer se cubrió de color, pues una de las actividades con las que se celebró al centro fue la exposición de una serie de pinturas hechas por los pequeños alumnos. Niños que, como agregó García Camil, son quienes mantienen en pie al lugar.

“

Pienso en este espacio y me imagino en la gran cantidad de historias y anécdotas que cada uno de ustedes (alumnos y maestros) tienen para contarnos. Y la gran cantidad de sueños e ilusiones que se han construido acompañados por la música, el teatro, la danza y las artes plásticas”. 

La labor de Santa Anita es relevante pues crea un reforzamiento con la sociedad porque “la política cultural se diseña a partir del acercamiento con la comunidad y la construcción de lo comunitario; más allá de la realización de los grandes eventos que convocan y atienden a una cantidad de público. El trabajo de nosotros pasa por estos centros culturales que reciben a las niñas y a los niños, y los hacen interesarse por las artes, y estimulan su lado sensitivo, empático, solidario e imaginativo. Todo esto les permitirá el día de mañana, como ciudadanos en una gran polis, que se esfuerza en desarrollar su faceta humanista”, comentó García Camil.

Además de la exhibición artística, se presentó el Ballet Folklórico Santa Anita que, acompañados por la la Banda de Música del Estado bajo la batuta de José Luis Ulloa, presentó el guapango norteño San Buenaventura.

A este se le sumó el concierto de CofraDúo, uno de las agrupaciones de trova más conocidas de la ciudad quienes fueron alumnos en el centro cultural. Y quienes apuntaron que para ellos fue “muy importante estar en este