Arte
Por
Christian García
Publicado el lunes, 1 de abril del 2024 a las 04:03
Ciudad de México.- La antología Antes de Decir Cualquiera de las Grandes Palabras, de David Huerta es, sí, un repaso por 50 años de trayectoria del poeta mexicano que falleció en 2022, pero también un diálogo en muchas capas. Una de ellas es la de poetas: primero la del autor, después la del antologador, el también poeta Hernán Bravo Varela, y luego la de las influencias, una de ellas el poeta español Antonio Gamoneda quien, en una frase, puede plantear un paso inicial para abordar este libro: “no hay tal cosa como prosa o poesía (…) hay poesía diversamente preparada”.
Es por ello que este volumen está contado no sólo como un poemario, sino como una novela en la que hay una narrativa que da forma al libro pero que también se ramifica y se distiende, se encuentra y se pierde entre voces y tonos distintos, con temas que se hermanan y se alejan.
Según detalla Bravo Varela en entrevista con Zócalo, hay en este título “una realidad exacta en el universo literario de David, porque el verso, el versículo y la prosa siempre lo asistieron para, desde la poesía, hacer una enorme panorámica y al mismo tiempo una toma microscópica del lenguaje, que para él era, probablemente, el protagonista y el antagonista mayor que ha dado la literatura desde que Homero, lo hizo.
“
David era un incansable lector de narrativa, era infatigable, y en numerosos textos críticos, ensayos, también podemos advertir la indudable cualidad de David como lector de novelas. Era un especialista en Cervantes, pero no sólo del Cervantes que aspiraba a ser poeta y acabo haciendo El Quijote, sino el gran autor de El Quijote que además se permitía incorporar poesía de diversas maneras. Por eso hay numerosos poemas de David que acuden y aluden a perspectivas directamente narrativas, como Celda, que en realidad es una especie de novela rusa en miniatura”.
Lecciones de estilo
Nacido en 1942 y fallecido en 2022, David Huerta es uno de los nombres ineludibles de la literatura mexicana de la segunda mitad del siglo 20. Con títulos como El Jardín de la Luz (1972) hasta El Viento en el Andén (2022) demostró un trabajo creativo proteico y variado, siempre en búsqueda de nuevos caminos y formas de enfrentar al lenguaje.
“
Creo que dividir a David en etapas o preferir una etapa sobre otra habla, incuestionablemente, de un gusto antológico pero creo que también habla de una serie de torpezas y limitaciones a la hora de emprender una navegación tan vasta como la que exige el océano de la obra de David.
“
Creo, sin duda, que la poesía que más ha permeado como imagen del poeta deslumbrante e influyente en las más recientes generaciones ha sido la de Versión, Cuaderno de Noviembre y el de Incurable, pero los demás libros donde críticos o redactores un tanto pobres de crítica han querido advertir un adelgazamiento, un aligeramiento o un acercamiento mayor a la anécdota de los libros posteriores de David, pecan un poco de miopía”, apunta.
Esto porque, según Bravo Varela, en la obra de Huerta se ve la influencia, mezcla y variación de “dos de los autores centrales para la tradición íntima de David, (Luis de) Góngora y (Francisco de) Quevedo, es muy difícil de advertir quién es el culterano y quien es el conceptista”.
“
Eso siempre me ha llamado la atención su manera, y sobre todo una manera de persistir en ampliar los horizontes, los límites de lo que se puede y no se puede cantar, lo que se puede y no se puede contar en un poema. Para mí eso ha sido una lección central y espero poder honrarlo en ese sentido de ensanchamiento de horizontes”, concluyó el también ensayista
A LEER:
Antes de Decir Cualquiera de las Grandes Palabras
Antología de David Huerta
Selección Hernán Bravo Varela
Era, 2023
224 páginas
339 pesos
Más sobre esta sección Más en Arte
Hace 15 horas
Hace 23 horas
Hace 1 dia
Hace 1 dia
Hace 1 dia
Hace 1 dia
Hace 1 dia
Hace 1 dia
Hace 2 dias