Sabinas, Coahuila.- Con una serie de guardias de honor, personal administrativo, educativo, de apoyo, estudiantes, familia y amigos, rindieron en las instalaciones del CBTIS 20, un homenaje póstumo, al director Francisco Acosta Cancino.

En punto de las 12 del mediodía el cuerpo del rector llegó hasta las instalaciones de su querido plantel, al que brindó más de 43 años de su vida, y en la que incluso se enamoró cuando fue estudiante de ahí mismo.

Su esposa e hijos y familiares abanderaban la carroza, los alumnos y exalumnos en respeto lo recibieron en la entrada del plantel donde el resto de la población lo esperaban para acompañarlo en su última visita.

Su remembranza estuvo a cargo de la maestra Flor de la Fuente, por su parte la catedrática Nora Chávez narró un pensamiento, mientras que la banda de guerra le dio el último pase de lista al sonoro de tambores y trompetas.

Hugo de la Fuente, profesor jubilado y amigo de Acosta Cancino, al que cariñosamente le decía Quico, expuso que el director murió en cuerpo pero no de espíritu, y el cual vivirá en el corazón de cada persona con la que convivió y disfrutó en este mundo terrenal.