Washington, D.C.– En una maniobra legal de emergencia, la administración del presidente Donald Trump solicitó a un tribunal de apelaciones la destitución de la gobernadora de la Reserva Federal (Fed), Lisa Cook, antes del lunes. La petición busca apartarla del cargo justo antes de la próxima votación del banco central sobre las tasas de interés.
El pasado 25 de agosto, Trump intentó despedir a Cook acusándola de un presunto fraude hipotecario, una acción que una jueza federal declaró ilegal el martes por la noche, ordenando la reinstalación de Cook en su puesto.
Según Trump, Cook habría declarado dos propiedades como “residencias principales” en julio de 2021 para obtener beneficios hipotecarios, cargos que ella ha negado.
La jueza Jia Cobb argumentó que los gobernadores de la Fed solo pueden ser destituidos “por causa”, lo que se limita a mala conducta durante su tiempo en el cargo. Cook, sin embargo, se unió a la junta en 2022, un año después de las supuestas irregularidades.
En su apelación de emergencia, los abogados de Trump insisten en que, incluso si la conducta ocurrió antes de su mandato, las acciones alegadas “indiscutiblemente ponen en duda la confiabilidad de Cook y si puede ser una administradora responsable de las tasas de interés y la economía”.
La urgencia de la petición se debe a que la Fed comienza su próxima reunión el martes, con un anuncio sobre las tasas de interés programado para el miércoles. Se espera que el banco central reduzca su tasa de referencia en un cuarto de punto, a aproximadamente 4.1 por ciento