Ciudad de México.- La novela “It Ends With Us” de Colleen Hoover ha sido un éxito comercial rotundo, pero no sin generar controversia. La historia, que aborda el tema de la violencia doméstica a través de la vida de su protagonista, Lily Bloom, ha sido tanto aclamada como criticada por su tratamiento del tema. Recientemente, la adaptación cinematográfica de la novela, protagonizada por Blake Lively y dirigida por Justin Baldoni, ha vuelto a poner en el centro de atención a Hoover y su obra, generando un debate sobre la representación de temas sensibles en los medios populares.

Antes de sumergirse en la discusión, es crucial mencionar que “It Ends With Us” trata sobre la violencia doméstica, un tema que puede ser difícil para algunos lectores y espectadores. Además, la novela y la película incluyen escenas gráficas que podrían resultar perturbadoras. Este contexto es fundamental para entender las críticas y preocupaciones que han surgido en torno a la obra y su adaptación.

Críticas a la narrativa y el enfoque de la obra
Desde su publicación, “It Ends With Us” ha dividido opiniones. Algunos defienden el libro por su accesibilidad y por poner el tema de la violencia doméstica en la conversación pública. Sin embargo, otros críticos argumentan que la novela aborda este tema de manera superficial y, en algunos casos, irresponsable. La historia se centra en Lily Bloom, quien se ve atrapada en una relación abusiva con Ryle, un cirujano con quien inicialmente comparte una conexión romántica. La narrativa mezcla elementos de una típica historia de amor con situaciones de abuso, lo que ha llevado a algunos a cuestionar la forma en que se presenta la violencia y la posible glorificación del comportamiento abusivo.

Uno de los puntos más polémicos es que, a pesar de las intenciones de Hoover de mostrar la complejidad de las relaciones abusivas, muchos lectores sienten que la novela no logra profundizar en el tema de manera adecuada. La obra podría dar la impresión de que ciertos comportamientos abusivos son justificados o al menos comprensibles, lo que puede ser peligroso, especialmente en un libro que llega a una audiencia tan amplia. Además, la inclusión de un triángulo amoroso en medio de una narrativa de abuso ha sido vista como una decisión cuestionable, que podría trivializar la seriedad del tema.

Adaptación cinematográfica y controversias en la producción
De acuerdo con el video de YouTube “No, seriously….what is going on with It Ends With Us?” de kayla says, a adaptación cinematográfica de “It Ends With Us” ha llevado estas controversias a un nuevo nivel. Justin Baldoni, quien no solo dirigió la película, sino que también interpretó al abusivo Ryle, ha sido el centro de rumores y especulaciones. Durante la promoción de la película, se ha observado una aparente distancia entre Baldoni y el resto del elenco, lo que ha despertado la curiosidad y preocupación de los fanáticos. Además, la forma en que se ha comercializado la película, presentándola en un principio como una comedia romántica, ha generado críticas, dado que podría inducir al error a espectadores no preparados para el contenido más oscuro y serio que emerge en la segunda mitad de la historia.

A pesar de la controversia, la película ha logrado captar la esencia del libro, para bien o para mal. Los críticos coinciden en que la película es una adaptación fiel, lo que significa que tanto los aciertos como los errores del libro se trasladan a la pantalla. Para aquellos familiarizados con la novela, la película no presenta grandes sorpresas. Sin embargo, quienes esperaban una historia de amor ligera podrían sentirse perturbados por la abrupta transición hacia temas más oscuros. Esto subraya la importancia de una promoción honesta y clara cuando se trata de contenidos sensibles, especialmente en producciones que llegan a una audiencia masiva.

En conclusión, tanto la novela como su adaptación cinematográfica han puesto de relieve la complejidad de representar temas como la violencia doméstica en la ficción. Mientras que “It Ends With Us” ha resonado profundamente con algunos lectores y espectadores, también ha generado un debate necesario sobre la responsabilidad de los creadores al abordar temas tan delicados.