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Por
Abdel Robles
Publicado el sábado, 27 de septiembre del 2008 a las 14:58
REPORTE ÍNDIGO/ ANABEL HERNÁNDEZ Cuando el 8 de mayo de 2008 Édgar Eusebio Millán fue asesinado, Genaro García Luna lamentó la muerte de uno de sus hombres más cercanos…
Hoy revelamos en Reporte Índigo que el presunto asesino de Millán, José Antonio Montes Garfias, fue contratado como elemento de la Policía Federal Preventiva (PFP) por el propio secretario de Seguridad Pública, quien solicitó y firmó su ingreso. Presentamos las pruebas…
Cuando el 26 de junio fue ejecutado Igor Labastida, director de Investigaciones de la PFP, la Secretaría de Seguridad Pública dijo que, junto con él, había sido asesinado uno de sus escoltas y que el otro había resultado mal herido…
Hoy revelamos en Reporte Índigo que los escoltas no eran tales. Eran dos jefes policiacos de primer nivel. Presentamos las pruebas. ¿Cuál fue la intención de identificarlos como escoltas?
Cuando el 5 de septiembre pasado Lorena González Hernández fue capturada y acusada de ser una de las líderes de la banda que secuestró a Fernando Martí, el titular de Seguridad Pública negó cualquier vinculación de ella con la PFP…
Hoy revelamos en Reporte Índigo que la comandante Lore no sólo era elemento activo de la PFP, sino que era más que una supervisora en la nómina. De hecho, era una de las consentidas de la corporación. Despachaba en amplias oficinas y estaba al servicio de Facundo Rosas…
¿Por qué mienten tanto García Luna y Facundo Rosas? ¿Por qué el Presidente solapa la evidente manipulación de la seguridad nacional?
¿Por qué el Congreso se prestó a la charada de una comparecencia en la que se habló de todo, menos de esto? Analicemos.
ASUNTOS INTERNOS…
Genaro García Luna solicitó el ingreso de elementos que resultaron presuntos homicidas y narcotraficantes. Además, con el subsecretario trabajaba una presunta secuestradora. ¿Dónde están los controles de confianza de la SSP?
Algo pasa en la PFP. En lugar de informar, miente y oculta información. Algo huele mal en la Secretaría de Seguridad Pública que encabeza Genaro García Luna. La Policía Federal Preventiva, bajo las órdenes de Facundo Rosas Rosas, subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial desde hace cinco meses, vive un cisma interno. Presuntos secuestradores infiltrados, policías asesinos de policías y altos mandos ejecutados. Todo en unos cuantos meses.
En vez de resolver el problema, los responsables de la seguridad nacional tratan de ocultarlo. Los sistemas de control de la SSP fallaron. Y le fallaron a García Luna y a Rosas Rosas. Hasta hace unos días, Lorena González Hernández, identificada como parte de la banda que secuestró al menor Fernando Martí en junio pasado, trabajó con Facundo Rosas en la Coordinación de Inteligencia para la Prevención del Delito.
Sus ex compañeros de trabajo afirman ahora que ella era una de las favoritas de los altos mandos de la PFP. Tenía una oficina, asistentes a su servicio y acordaba directamente con el subsecretario. Hace ocho años, cuando era coordinador de Inteligencia para la Prevención del Delito de la PFP, García Luna invitó a trabajar a José Antonio Montes Garfias. La hoja de ingreso fue firmada por el ahora secretario de Seguridad Pública y por José Aristeo Gómez Martínez. Hoy Montes Garfias está arraigado acusado de haber asesinado a Édgar Eusebio Millán, el pasado 8 de mayo. También es sospechoso de haber participado en el homicidio de Roberto Velasco Bravo, otro alto mando de la Coordinación de Inteligencia. Y Gómez Martínez fue ejecutado en mayo.
El 26 de junio pasado, Igor Labastida Calderón, director de Investigaciones de la PFP, confidente y ex jefe de Lorena González en la AFI, fue ejecutado al estilo del crimen organizado cuando se encontraba en una fonda. Oficialmente, la SSP dijo que su “escolta” José María Ochoa había sido ultimado junto con Labastida. Hoy se cuenta con documentación oficial que demuestra que Ochoa no era “escolta” de Labastida, sino director general de la Coordinación de Inteligencia para la Prevención del Delito.
Nuevamente queda en evidencia que la mentira y la manipulación han sido la regla para evitar rendir cuentas sobre la crisis por la que atraviesa la PFP. ¿Qué está pasando en la PFP? ¿Qué esconden Genaro García y Facundo Rosas? Ésta es la historia. Aquí están las pruebas.
¿QUIÉN ASESINÓ A ÉDGAR EUSEBIO MILLÁN?
José Antonio Montes Garfias, maestro normalista, ingresó a la PFP el 16 de agosto de 2000 a invitación de Genaro García Luna, que entonces tenía el cargo de coordinador de Inteligencia para la Prevenc
México, DF.- El presunto asesino fue contratado a solicitud del propio secretario. Te presentamos las pruebas… Hoy revelamos que dichos escoltas eran dos jefes policiacos de primer nivel. También te presentamos las pruebas… Hoy revelamos que la comandante Lore era una de las consentidas de la corporación.
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