Indicó de igual manera que la suspensión de importación afecta principalmente a los productores del norte del país, ya que diariamente se movilizan entre 4 mil y 5 mil cabezas hacia el mercado estadunidense.
Anaya explicó que tanto México como la Unión Americana enfrentaron esta plaga en los años 70 y 80, y su erradicación requirió tres décadas de esfuerzos coordinados entre ambos países. El gusano barrenador reapareció a principios de 2024 en Panamá, lo que encendió las alertas sanitarias.
En julio de ese mismo año, (Senasica) emitió una alerta sanitaria para tomar medidas de contención en la frontera sur, principalmente por la entrada de ganado desde Centroamérica.
“ El gusano barrenador ataca las heridas del ganado; es vital tratarlas de inmediato para evitar su propagación”, señaló Anaya.
Añadió que existen centros de contención, incluso en lugares como Kazajistán, para evitar que la plaga se extienda hacia otras regiones del país.
Finalmente, subrayó la necesidad de una estrategia binacional para erradicar la plaga, que incluya la inspección y verificación de todo el ganado movilizado, así como la dispersión de moscas estériles —una técnica probada— para eliminar al gusano barrenador.