Guadalajara.- El subdirector médico en el turno nocturno del Hospital de Especialidades del IMSS Jalisco, Rubén Santoyo Ayala, dijo que las mujeres son las más afectadas por la formación de piedras en la vesícula (colelitiasis), con una prevalencia de hasta dos casos por cada varón.

Agregó que la vesícula biliar actúa como un almacenador de la bilis (líquido amarillo verdoso que se produce en el hígado secretado por el sistema biliar hacía el intestino), el cual tiene por función ayudar a la absorción de las grasas.

El experto detalló que factores como la edad (ser mayor de 40 años), el embarazo, el uso de anticonceptivos prolongado, haberse sometido a terapias hormonales, cursar con obesidad, con dislipidemia u otra enfermedad metabólica o del hígado contribuyen a la formación de piedras en la vesícula.

Indicó que los principales síntomas de la colelitiasis son: nauseas, vómitos, dolor en la parte baja del abdomen del lado derecho, distención abdominal e irritación y presencia de fiebre, “no obstante hasta 40% de los pacientes cursa asintomático o con manifestaciones leves”.

Santoyo Ayala manifestó que la colecistectomía es la cirugía que se realiza para tratar este tipo de padecimientos, y es de hecho uno de los procedimientos quirúrgicos más realizados en los hospitales.

Estbleció que es importante realizar un diagnóstico diferencial derivado de que no todos los dolores abdominales se asocian a piedras en la vesícula, por lo tanto es necesario realizar una historia clínica, además de un ecosonograma hepático y de vías biliares y adicionalmente una tomografía abdominal.

El especialista mencionó que es necesario realizar estudios complementarios como biometría hemática, prueba de función hepática y la medición de amilasa y bilirrubina.

Afirmó que una vez que se diagnostica el padecimiento, el manejo inicial es farmacológico para atender el dolor y la posible infección con suministro de antibióticos, además de indicarse hidratación previo a la realización de la cirugía.

Puntualizó que los cálculos biliares son factor de riesgo para el desarrollo de cáncer de vesícula.

“Hasta en 95% las piedras están formadas por colesterol, por lo tanto una alimentación adecuada y la práctica de ejercicio pueden prevenir su desarrollo en más de 30%”, concluyó.