Ciudad de México.- El coordinador de los diputados del PRI, César Camacho, afirmó que la violencia, inseguridad y males que nos aquejan, se enfrentan no sólo con pasión, sino con inteligencia; con actitud arrojada, pero también apego a la ley, y con respeto a los derechos de las personas, pero sin olvidar el altísimo sentido de responsabilidad.

Manifestó que únicamente a través de la cultura se hace frente a todas las manifestaciones perversas que amenazan la convivencia social, pues son expresiones que resultan no sólo del ingenio, sino de la pasión y la emoción.

Al inaugurar la “Exposición Colectiva de Artistas Fresnillenses. Tierra Inquieta”,montada en el Palacio Legislativo de San Lázaro, en la que participan el fotógrafo Pedro Valtierra, y los artistas Leopoldo Elías Smith, Jorge Saldaña López, entre otros, el político mexiquense consideró necesario “mantener un clima de libertades, uno en el que podamos luchar por la justicia para poder vivir en paz”, y el arte, aseguró, es un vehículo de sentimientos que no tiene límites.

“En la medida en que más nos beneficiemos de las manifestaciones artísticas, estoy cierto de que los artistas se sentirán mucho más satisfechos”, agregó.

César Camacho destacó que de la exposición no sólo se habrán de favorecer cientos de diputados, sino las miles de personas que transitan por el recinto legislativo que está abierto de par en par a la comunidad.

En este contexto compartió la reflexión de que los representantes populares podrán estar tres o seis años en un cargo, pero cuando hay compromiso, éste se adquiere para toda la vida.

El diputado también priista por Zacatecas, Francisco Escobedo Villegas, destacó la gran tradición, cultura e historia de su terruño y una de las entidades que más museos alberga lo que le hace merecer un honroso segundo lugar en disponibilidad de esta infraestructura cultural, sólo después de la Ciudad de México.

Mencionó que es un privilegio el tener la exposición de artistas zacatecanos, pues entre las obras se exhibe una fotografía que tuvo el Premio Rey de España, en el año de 1998, del maestro Pedro Valtierra, dando idea de lo extraordinario, la magnitud y el talento que se tiene en Zacatecas.