Guadalajara Jal.- Será el próximo lunes alrededor de las 9:00 de la mañana que los especialistas de la Unidad de Quemados del Centro Médico de Occidente de Guadalajara podrían estar dando de alta a Jesús Fernando Lara Ruiz, adolescente de 14 años que sobrevivió a la explosión en un “pocito” de carbón en Sabinas.

De acuerdo con el doctor Marcelo Castillero, durante el fin de semana se realizarán los últimos estudios y evaluaciones de las lesiones pulmonares del menor, así como el retiro de residuos de piedras que se le incrustaron en la cara.

“Saldrá caminando y nos da mucho gusto porque su evolución fue extraordinaria, fue muy buena”, señaló el médico.

De acuerdo con los estudios que se realizaron durante el jueves y viernes, será importante que se le siga brindando atención tanto médica como psicológica, para que logre recuperarse por completo.

“De acuerdo con lo que comenta su mamá, el impacto psicológico no ha sido tan marcado, sin embargo el tiempo y la reacción seguro ameritarán que brindemos apoyo cercano a Jesús, que es joven y ha demostrado una gran fortaleza”.

¿Qué nos puede decir del niño minero de Coahuila?

“Les puedo informar que el día de hoy tiene 48 horas de haber ingresado a nuestro hospital, se encuentra en muy buenas condiciones generales, está consciente, ya le quitamos el apoyo ventilatorio, está comiendo y lo único que nos está diciendo es que ya quiere irse a su casa.

”Podemos decir que el paciente está ya fuera de peligro, que se recuperó perfectamente de las lesiones que sufrió en Coahuila y que seguramente en las próximas 72 horas lo daremos de alta”.

¿De acuerdo con su experiencia y en función de que se dijo que fue una explosión muy fuerte, que lo arrojó varios metros, la evolución fue muy buena?

“Bueno, aquí tenemos dos cosas a favor: que el muchacho tiene 15 años, que está muy fuerte y la tercera que la atención que se le brindó en el IMSS fue extraordinaria.

”Prácticamente después de la explosión fue trasladado a un hospital general de zona. Ahí recibe los primeros auxilios, ahí es donde ven que su brazo ya está perdido, le hacen la amputación, lo mandan en avión a la unidad de quemados por las lesiones pulmonares que tenía, por la quemadura de vías aéreas altas; llega a este hospital, se atiende perfectamente bien y bueno, la evolución ya la están sabiendo, está en muy buenas condiciones”.