Saltillo, Coah.- La torta de jamón y queso más grande del mundo, con una longitud de más de 402 metros, fue elaborada la tarde de ayer en Saltillo por cerca de 500 estudiantes de secundaria y bachillerato.

La gigantesca torta no tuvo el reconocimiento oficial de los Record Guinness; sin embargo, puede considerarse la más larga jamás elaborada, pues la que cuenta actualmente con la marca mide -aseguraron los organizadores- sólo 385 metros.

“Se trata de romper el Récord Guinness, que ya lo hicimos, con la torta más grande del mundo; lo anterior con el propósito de enseñar en nuestros alumnos valores, trabajo de cooperación y además poder compartir nuestro trabajo con otra gente, comentó la directora de la institución, María Elena Chávez.

Este alimento tradicional mexicano fue elaborado por los estudiantes y sus maestros en la explanada central de una plaza comercial al norte de la ciudad donde por cerca de 3 horas trabajaron para colocarla sobre 150 mesas dispuestas en espiral.

“Había 2 ó 3 chavos por mesa y entre ellos embarraban, lo que es la mayonesa y luego ponían el jamón la lechuga y el tomate, cuenta Lizbeth Reinoso, estudiante de secundaria, mientras da una gran mordida a su torta.

La idea, explica la directora, surgió de los profesores como el gran cierre de la semana cultural que organizan cada año en esta escuela. “Pero además pensamos que el trabajo que íbamos a hacer podría ser también benéfico, entonces decidimos donar la gran mayoría de la torta a instituciones de asistencia social, ahorita terminando la vamos a llevar personalmente a la Casa Cuna”.

La tarea fue titánica, explica el profesor César Cerda, tuvimos que hablar con los alumnos, con sus papás, y después decidirnos a comprar todo.

“Fueron más de 900 baguetes, igualmente fueron 5 tarros de 3 kilos cada uno de los que la mayonesa, le agregamos 60 kilos de jamón para poder cumplir lo que es el reto, y como unos 40 kilos de lo que es queso. ¿Cebolla? También, y se usaron 50 lechugas y 30 kilogramos de tomate”

Los directivos aseguran que no reunieron el dinero para traer a los jueces de Guinness; sin embargo, decidieron registrar la hazaña ante notario público y documentar con fotos y video el suceso, pues en un futuro intentarán lograr el registro oficial del récord.