París.- El Gobierno de Brasil, encabezado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, manifestó este domingo su solidaridad y apoyo a la periodista Verónica Dalcanal, de la televisión pública brasileña, quien denunció haber sido acosada sexualmente por tres hombres mientras trabajaba en la cobertura de los Juegos Olímpicos de París 2024.

“Es inaceptable que periodistas mujeres continúen siendo víctimas de esa violencia”, denunció en una nota oficial la Secretaría de Comunicación Social (Secom) de la Presidencia brasileña.

La nota agregó que la Secom ‘se solidariza con la reportera‘ y le dará todo el apoyo legal que sea necesario para enfrentar este momento en el evento deportivo más importante del mundo.

En el mismo sentido se manifestó también la ministra de Mujeres de esta nación, Cida Mendonça, quien consideró ‘inaceptable que algunos hombres crean ser propietarios de nuestros cuerpos y que periodistas y otras mujeres pasen por ese tipo de situaciones’.

Dalcanal, enviada por la Empresa Brasil de Comunicación (EBC) para la cobertura de los Juegos Olímpicos, denunció que, este sábado, en los momentos en que se preparaba para una transmisión en directo desde París, tres hombres se le acercaron, la tocaron e incluso la besaron a pesar de negarse a ello, hasta que finalmente pudo separarse de ellos.

“Es indignante y triste, porque este trabajo quedará marcado en mi vida también por este episodio, cuando cubrir los Juegos Olímpicos en París era un sueño profesional que tuve la suerte de poder cumplir. Como otros compañeros, quería recordar esta cobertura solo por las entrevistas, los artículos escritos, las entradas en vivo y la emoción de seguir a nuestros deportistas. Lamentablemente no será así”, protestó Dalcanal.

Durante a cobertura dos Jogos Olímpicos neste sábado (3), a repórter Verônica Dalcanal, da @ebcnarede, foi importunada por torcedores enquanto passava as informações ao vivo. Lamentável que casos como esse continuem a se repetir. pic.twitter.com/EsllAtz2av

— TV Brasil (@TVBrasil) August 4, 2024

Si bien esta es la primera situación de este tipo del que se tiene conocimiento en la actual justa olímpica, han existido hechos de otra índole que han puesto en evidencia la vulnerabilidad de la seguridad en París durante este evento.