Ciudad de México.- Steve Carell se ganó un nombre en la comedia gracias a personajes como el del carismático Michael Scott en The Office y mostró su registro dramático con papeles como el de John Du Pont en Foxcatcher. Recientemente volvió a los cines como Gru, el supervillano de la saga que comparte con los ya famosos y amarillos minions, en Minions: The Origen de Gru, y hoy cumple 60 años.

Carell nació el 16 de agosto de 1962 en Concord, Massachusetts. Era el pequeño de los cuatro hermanos y su apellido paterno originalmente era Caroselli, ya que tenían orígenes italianos, lo cambiaron en los 50. 

En sus años de secundaria, dijo a GQ en 2015, le encantaba practicar deportes. 

Según contó Esquire en 2018, Carell no creció obsesionado con hacer reír, ni era particularmente fan del género, aunque sí le encantaba escuchar discos de comedia. 

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Especialmente George Carlin y Steve Martin, escuchaba esas rutinas una y otra vez. Creo que no fui consciente en ese momento de que estaba estudiando. Intentaba entender qué los hacía graciosos, por qué lo disfrutaba tanto, qué hacían con el lenguaje, qué hacían con la distracción”. 

Tras graduarse en Historia y Teatro en la Universidad de Denison a mediados de los ochenta, su intención era estudiar derecho, pero la idea no le convencía. Así que acabó mudándose a Chicago para hacer algo que lo motivaba: actuar. Allí se unió a una compañía de improvisación llamada Second City. Dos años después, debutó en el cine con La Pequeña Pícara. 

A este primer título le siguieron otros trabajos en la pequeña y gran pantalla como The Dana Carvey Show o Tomorrow Night. En 1999, Las Noticias de Jon Stewart, un programa satírico en el que durante seis años interpretó a un corresponsal despistado, marcó un punto de inflexión en su carrera. En 2005, Michael Scott, el personaje que interpretó en la serie The Office apuntaló su éxito. 

La ficción, adaptación de la británica homónima y grabada como un falso documental, seguía el día a día de los empleados de una sucursal de Dunder-Mifflin, una empresa de venta de productos de papel. En 2011, dos temporadas antes del final de la serie, Carell dejó el personaje, que le había reportado diversas nominaciones a los Emmy y un Globo de Oro. 

Carell compaginó la tv con el cine y participó en las películas Como Dios, en 2003; El Reportero: La Leyenda de Ron Burgundy, en 2004; Virgen a los 40, de 2005, cinta que protagonizó y coescribió. Un año más tarde interpretó a Frank, un experto en el escritor Marcel Proust que se traslada a casa de su hermana tras un intento de suicidio, en la alabada comedia negra Pequeña Miss Sunshine. 

El actor siguió sumando filmografía con los títulos Sigo Como Dios, secuela de Como Dios en 2006; Como la Vida Misma, un año después; en 2008 protagonizó Superagente 86 de Película y en 2011, Loco y Estúpido Amor, entre otros. 

Sus proyectos no se limitaron a la comedia y demostró su talento interpretativo también en roles dramáticos, como el del millonario, entrenador y asesino John Du Pont, en Foxcatcher. O el de David Sheff en Beautiful Boy; Larry “Doc” Sheperd, en La Última Bandera y el del exsecretario de Defensa de los Estados Unidos, Donald Rumsfeld, en Vice. “Absolutamente, sí. Me encanta hacer cosas así y creo que es solo cuestión de encontrar la correcta”, dijo a GQ en 2018 sobre volver a la comedia tras interpretar a Rumsfeld.