Hermosillo, Son.- Ayer presentaron ante los medios a las ocho personas que fueron detenidas en el noroeste de México acusadas de matar a dos niños y una mujer como parte de un ritual de sacrificio en honor a la Santa Muerte, según la policía del estado de Sonora.

“Ocho personas fueron detenidas por la Policía Estatal Investigadora por el homicidio de dos niños de 10 años y de una mujer de 45 años, a quienes sacrificaron en la población de Nacozari, como culto a ‘La Santa Muerte’”, indicó esa fuerza policial en un comunicado.

Los detenidos son cuatro mujeres (incluida la que se cree es la líder del grupo), tres hombres y una adolescente de 15 años, y casi todos ellos tienen relación de parentesco entre sí.

“Se decían integrantes de una secta” que adoraba a la Santa Muerte, representada por un esqueleto vestido de mujer y cuyo culto es considerado sacrílego por la Iglesia católica.

La historia de los asesinatos

Según la Fiscalía estatal, la líder del colectivo, Silvia Meraz, “convenció al resto del grupo de ofrecer sacrificios humanos a ‘La Santa Muerte’, ya que éstos les traerían beneficios tanto en lo económico como en la salud y les darían ‘protección’”, según el comunicado.

Los crímenes fueron llevados a cabo en la localidad de Nacozari de García, en el estado de Sonora, y las víctimas también tenían relación con los presuntos asesinos.

La primera, una mujer de 44 años amiga de Meraz, fue sacrificada en diciembre de 2009.

Le siguió, en julio de 2010, el hijastro de uno de los detenidos, concubino de la líder de la secta y, recientemente, el otro niño, hijastro de un hijo de esta mujer.

Fue la denuncia por la desaparición de este menor la que permitió a la Policía desarticular el grupo y encontrar los tres cadáveres en las afueras de Nacozari de García.

El cuerpo de la primera víctima tiene signos de haber sido semicalcinado y el del último sacrificado había sido enterrado bajo una losa de cemento “para impedir que desprendiera malos olores”, explicó la Policía Estatal Investigadora.

La muerte es popular

El culto a la Santa Muerte cuenta con muchos seguidores en México, especialmente gente de escasos recursos, delincuentes y policías, y obtuvo en 2003 el registro oficial como asociación religiosa, aunque lo perdió tiempo después por presiones de la jerarquía católica.

En 1989 fueron descubiertos en un rancho de Tamaulipas (noreste) 12 cadáveres de personas sacrificadas como parte de ritos narcosatánicos relacionados con la devoción a esta imagen.

Y en septiembre del año pasado fue condenado a 12 años de prisión por delitos electorales el líder de la autodenominada Iglesia de la Santa Muerte en México, David Romo, que también enfrenta cargos por extorsión y secuestro.

Condena Iglesia culto a la Santa Muerte

La llamada Santa Muerte no puede ser santa, porque es enemiga de Dios y las personas que la veneran, adoran el satanismo, aseguró el sacerdote de la religión católica Manuel Campas García.

El párroco del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, en Nogales, señaló que la muerte es oscuridad y ceguera y que en cambio el verdadero Dios promueve, respeta y valora la vida y no la muerte.

“Debemos unirnos en oración en estos tiempos tan difíciles, tan dolorosos como el caso éste de Nacozari, para generar vida, por eso aprovecho para invitar a las personas a unirnos al misterio de la pasión, muerte y resurrección de Jesús”, dijo.

Campas García mencionó que cada persona tiene el derecho a profesar cualquier creencia o religión como lo señaló el papa Benedicto XVI en su reciente visita a México, excepto aquellas que vayan en contra de Dios.

“Una de las cosas que resaltó el Papa, es el derecho a la religión a expresar su fe, pero no en las cuestiones que no van con relación a Dios, entonces la Santa Muerte es satanismo y no se puede adorar lo que no existe”, enfatizó.