Ramos Arizpe, Coahuila.- Un niño de 4 años perdió la vida ayer por la tarde. Autoridades ministeriales investigan si el deceso sobreviene a la omisión de cuidados por parte de sus padres, quienes lo dejaron sin supervisión adulta mientras ellos se encontraban en la tienda.

Fuentes ministeriales corroboraron a las 17:30 horas, el deceso de William “N”, el cual fue confirmado por los médicos del Hospital Regional 33 del IMSS. Las causas de la muerte del menor se derivaron a consecuencia de que este terminó suspendido de un clavo, cuando intentó ingresar a su casa ubicada en la calle Ahualulco 988, en la colonia Analco II.

Las autoridades argumentaron que aparentemente William jugaba en la calle. Su mamá, María del Carmen, de 26 años, se encontraba al pendiente de él, pero por unos momentos se encontró bajo la supervisión de sus vecinos Michelle y Carlos, de 15 y 16, ya que la madre había ido a la tienda a encontrarse con su pareja.

LA TRAGEDIA

Al filo de las 16:00 horas sobrevino a la tragedia, ya que el niño decidió retirarse a su casa, pretendiendo brincarse la puerta exterior para ingresar en ella, como otras muchas veces lo había hecho; desgraciadamente el gorro de la sudadera que portaba el infante quedó trabado de un clavo, el cual no se liberó al brincarse Gael, quedando suspendido y sin la posibilidad de liberarse.

Varios minutos transcurrieron y nadie notó la ausencia de William, o del “Güero”, como le decían cariñosamente sus vecinos. Fue hasta que su mamá María del Carmen retornó del establecimiento, en compañía de su esposo Wilber, de 35 años, que encontraron la dramática escena.

PIDEN APOYO

Alarmados por lo ocurrido, María del Carmen y Wilber descolgaron el cuerpo del pequeño y solicitaron que una de sus vecinas los trasladara al Hospital Ixtlero para tratar de salvarle la vida al niño.

A pesar de los esfuerzos para que William se quedara con ellos, todo fue inútil. Al arribar al nosocomio los galenos dieron la fatal noticia a los deudos, quienes no pudieron detener el llanto.

Bastaron unos minutos para que la noticia del fallecimiento del menor llegara a los parientes, amigos y vecinos, quienes consternados arribaron al hospital, donde autoridades ministeriales y policiacas ya se encontraban.

Fue el agente del Ministerio Público quien dio fe del deceso y ordenó el traslado del cuerpo al Semefo, donde le fue practicada la necropsia de ley. La autoridad se desplazó en compañía de agentes ministeriales, policiales y de Servicios Periciales al domicilio de la familia Pérez Rivera, para esclarecer las causas que llevaron al triste desenlace.

VECINOS HABLAN

Los vecinos del la víctima aseguraron que sus padres trabajan en una empresa, no especificando en cuál, y aseguraron que en repetidas ocasiones William terminaba sus clases en el Jardín de Niños Vicente Suárez y era cuidado por ellos.

“Era común que nosotros o el vecino de enfrente lo cuidara después de salir de la escuela, mientras su mamá y su papá se encontraban trabajando”, aseguró Michelle López, vecina del sector.

Por otra parte, su pareja Carlos Alberto aseguró que precisamente la noche anterior se encontraba el niño en su casa mientras prendían una fogata. “No era la primera vez que se brincaba, cuando se quedaba afuera, se brincaba y se metía por la ventana”, aseguró Carlos. Vecinas de la cuadra aseguraron que William era como cualquier niño, juguetón y muy despierto.