Ciudad de México.- La pandemia no acabó con la fiesta, sino que la incrementó en al menos cinco alcaldías de la Ciudad de México.

Sobre Avenida Las Torres, en Iztapalapa, hay un pequeño puesto que ofrece comida y bebidas alcohólicas.

Se trata de Las Fregonas, una casa en obra negra de dos pisos repleta de un humo que se llena de color por leds y lasers mientras los asistentes se aglomeran para ingerir los tragos y bailar al ritmo de un DJ.

Y esta es sólo una de las 3 mil chelerías que la concejal Olivia Garza estima que hay en la Alcaldía, cifra derivada de recorridos y denuncias vecinales.

“ Es un gran número de negocios que operan en la impunidad, cuando se dio el cambio a semáforo verde, es cuando los vecinos acudieron con nosotros de que más personas consumían bebidas alcohólicas, de que algunos incluso consumían u ofrecían drogas”, detalla.

Habitantes de Iztapalapa indican que los puestos se ponen regularmente de jueves a domingo.

“ El ruido es muy fuerte, al grado que no nos dejan dormir. A las cinco o seis de la mañana están con un escándalo muy fuerte y para nosotros es molesto”, acusa una vecina.

La mujer explica que inclusive en una esquina hay dos chelerías: Las Fregonas y una en medio del camellón.

En un recorrido, Grupo REFORMA comprobó que los puestos invaden un área de juegos infantiles, donde amarran las lonas.

Pero Iztapalapa no es la única demarcación afectada.

Las chelerías se han adueñado de la banqueta sobre Avenida Cuauhtémoc, entre Municipio Libre y Eje 8 Popocatépetl, en la Alcaldía Benito Juárez.

Vecinos acusan que a altas horas de la noche dichos locales se mantienen abiertos, aún después de las 00:00 horas.

El encargado del local en la esquina de Cuauhtémoc con Municipio Libre presume horarios hasta después de la media noche y menús con bebidas que mezclan alcohol con energizantes, cuyo consumo no es recomendado por la Secretaría de Salud.

Muy cerca de la sede de Benito Juárez, se disfrazan de restaurantes, donde la comida preparada no es su principal atractivo.

En el Centro Histórico, en la Alcaldía Cuauhtémoc, la situación es muy diferente: las chelerías son eso, sin temor a ser nombradas así.

En la Calle de San Jerónimo, a la mitad de la cuadra, hay un par de negocios, apenas son locales de 4 por 4 metros, pero con un gran almacén de cerveza.

El viernes 29 de abril, un operativo alertó a los bares de la zona de Regina y, aunque se logró clausurar ocho establecimientos con este dispositivo, algunos sólo bajaron sus cortinas alrededor de 15 minutos, con los asistentes dentro, y la fiesta volvió a la normalidad.

Pese a que hace un año la Autoridad del Centro Histórico, cuando la encabezaba Dunia Ludlow, tenía un proyecto para mantener activo y lejos del abandono a este corredor, actualmente luce desolado.

Coyoacán es otra de las demarcaciones más afectadas por las chelerías y, hasta el momento, la Administración de Giovani Gutiérrez ha clausurado 60 negocios de este tipo. Resaltó que había alrededor de 280.

“ Estas chelerías estaban montadas en estacionamientos de casas, en estacionamientos de unidades habitacionales, incluso en cajuelas de coches, en tianguis, en mercados”, sumó.

En Coyoacán las colonias más afectadas son: Pedregal de Santo Domingo, la CTM Culhuacán, Carmen Serdán, Santa Úrsula y el Ajusco.

La Alcaldesa de Azcapotzalco, Margarita Saldaña, señaló que en su demarcación también han aumentado.

“ Hemos hecho 50 operativos en ferias y en estos 50 operativos hemos eliminado más de 35 chelerías”, explicó.

En tianguis han desactivado alrededor de 20 comercios.