Ciudad de México.- Son criticadas luego de su muerte. Marina Menegazzo, de 22 años, y María José Coni, de 21, fueron asesinadas en Montañita, Ecuador, y a la vez culpadas por su destino fatal. Ellas no accedieron a las peticiones sexuales de sus victimarios y por eso perdieron sus vidas. Una carta compartida en Facebook busca cambiar esta forma de pensar que culpa a las víctimas frente a sus agresores.

“Ayer me mataron” es una misiva de empatía con las víctimas. Establece una crítica para crear conciencia sobre la igualdad de género. Desde Facebook, su autora ratifica la minimización del hecho de sangre por el simple hecho de tratarse de mujeres: independientes y cómodas con su género.

Guadalupe Acosta es una estudiante universitaria de Paraguay. Ella se cansó de los señalamientos hacia las turistas como las responsables de sus muertes, según precisó al diario “Perú.21”. Su carta compartida en Facebook describe desde la perspectiva de las víctimas el sentir de muchas mujeres silenciadas por los prejuicios, críticas e injusticias que existen hacia las mujeres.

“Me negué a que me tocaran y con un palo me reventaron el cráneo. Me metieron una cuchillada y dejaron que muera desangrada”, inicia el relato en Facebook de Acosta. “Pero peor que la muerte, fue la humillación que vino después. Desde el momento que tuvieron mi cuerpo inerte nadie se preguntó donde estaba el hijo de puta que acabó con mis sueños, mis esperanzas, mi vida.

“No, más bien empezaron a hacerme preguntas inútiles. A mí, ¿Se imaginan? una muerta, que no puede hablar, que no puede defenderse. ¿Qué ropa tenías? ¿Por qué andabas sola? ¿Cómo una mujer va a viajar sin compañía? Te metiste en un barrio peligroso, ¿Qué esperabas? Cuestionaron a mis padres, por darme alas, por dejar que sea independiente, como cualquier ser humano. Les dijeron que seguro andábamos drogadas y lo buscamos, que algo hicimos, que ellos deberían habernos tenido vigiladas”.

Según dijo Acosta al citado medio, la carta tiene el propósito de concienciar sobre los problemas de igualdad de género. “Te pido que por mí y por todas las mujeres a quienes nos callaron, nos silenciaron, nos cagaron la vida y los sueños, levantes la voz. Vamos a pelear, yo a tu lado, en espíritu, y te prometo que un día vamos a ser tantas, que no existirán la cantidad de bolsas suficientes para callarnos a todas”, dice la misiva en Facebook.

Según el fiscal del caso, Eduardo Gallardo Rodas, uno de los detenidos por sospechoso del asesinato de las turistas argentinas confesó el cómo y por qué ejecutó su delito.

“Según el relato del detenido, él y su amigo estaban alcoholizados y uno llevó a una de las chicas a su cuarto e intentó tocarla, la joven se resistió y este le pegó con un palo en la cabeza que la mató instantáneamente”, dijo Rodas. Agregó que “asustado, corrió a la otra habitación y encontró a la otra joven apuñalada en el tórax sangrando”.