Los alcaldes electos del PRI partirán semana este miércoles en Saltillo. Junto con los diputados federales electos, tienen encerrona con el gobernador Miguel Ángel Riquelme. La intención del encuentro no es felicitarlos ni echar las campanas al vuelo por el resultado de la elección del 6 de junio, sino apurarlos a que concluyan su plan de gobierno. El tiempo apremia y las necesidades de los coahuilenses también, sobre todo por los recortes al presupuesto y las amenazas de la cuatroté para que se agudicen el próximo año. Ya ganaron, pero ante las ocurrencias de Palacio Nacional, el escenario no es halagador, de ahí que urgen planes de trabajo concretos, reales. Además, hay que cumplirle a los votantes, a los de casa, pero sobre todo a los que los identificaron como alternativa para cerrarle el paso a Morena.

Los contrapesos

En cuanto a los diputados federales electos, como se sabe, por parte de Coahuila habrá ocho. Los de mayoría relativa: Cristina Amezcua, Jericó Abramo Masso, José Antonio Gutiérrez Jardón, Shamir Fernández Hernández y Jaime Bueno Zertuche, además de los tres plurinominales: Rubén Moreira Valdez, Rodrigo Fuentes Ávila y Tereso Medina Ramírez, quien, como lo comentamos, no se equivoca al momento de buscar un espacio en la nómina oficial y alcanzó de panzazo una pluri por la Segunda Circunscripción.

Los diputados federales del PRI por Coahuila, nos señalan, deberán tener en claro una tarea fundamental: generar contrapesos con el Gobierno federal.

A conveniencia

La virulenta reacción del director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett Díaz, contra el gobernador Miguel Ángel Riquelme, a quien quiso endosar la responsabilidad del Gobierno federal por la muerte de siete trabajadores en una mina de Múzquiz, descobijó la negligencia que por años ha tenido la Secretaría de Trabajo y Previsión Social en la Región Carbonífera, al no contar con la cantidad suficiente de inspectores para supervisar las condiciones de seguridad en las excavaciones.

Si la situación de vigilancia en las minas históricamente ha sido grave, se agudizó con la cuatroté, ante el despido de burócratas de todas las áreas, incluso operativas y esenciales, como la seguridad en centros de trabajo.

No cabe duda de que la austeridad republicana es a conveniencia y a discreción, aun cuando se pongan de por medio vidas humanas.

Como recién nacido

Riquelme viajó la tarde de ayer a Guadalajara, en donde se reunió con su colega de Jalisco, Enrique Alfaro, por ahora, la principal carta política de Movimiento Ciudadano. Vaya usted a saber qué grilla traerán.

El caso es que ante el encontronazo por Twitter con Bartlett, quien lo acusó de tener intereses en el carbón, Riquelme dejó tiempo para la broma: “estoy como recién nacido: no tengo ningún pendiente, ni en las licitaciones ni en la asignación de los contratos”.

El Gobernador recordó que el problema lo tiene por completo el Gobierno federal, pues el mandamás en la CFE se empeñó en hacer todo por su cuenta y a su manera.

En el reconocimiento

Muy cercano al gobernador Riquelme se ve al Alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas. Este martes anduvieron en el desayuno con motivo de la entrega de reconocimientos y de uniformes para brigadistas de las distintas dependencias y organismos estatales, federales, municipales y autónomos que le entran a combatir el fuego en cada incendio forestal.

Al que le pusieron falta en el evento fue a Everardo Durán Flores. El Alcalde de Arteaga amaneció con un cuadro de gripe y optó por guardarse en casa, no vaya a ser otra cosa. “Hablé con él temprano, estornudó tres veces y le dije ‘mejor ahí quédate’”, dijo el Gobernador, entre risas de los presentes.

Ya regresaron

Regresaron a sus labores Jorge Zermeño Infante y Alfredo Paredes López. Luego del resultado de la contienda del 6 de junio, que no les favoreció luego de buscar ser diputados federales, había que retomar las riendas del Gobierno municipal en Torreón y Monclova, respectivamente.

Paredes no tiene mayores problemas en materia administrativa, ni los tendrá con el proceso de entrega recepción, pero el caso de Zermeño es distinto y si hay un Gobierno municipal con pendientes, es precisamente el de la Perla de La Laguna.