Los señalamientos de corrupción en el Ayuntamiento de Torreón, que encabeza Román Alberto Cepeda González, acapararon la atención en el Congreso del Estado durante la sesión de este viernes. El diputado de Morena, Antonio Attolini Murra, presentó un punto de acuerdo para que el alcalde, a quien apodó irónicamente “Robán Alberto,” explique las “inconsistencias” detectadas en el programa Iluminando Torreón.

La polémica gira en torno a un desajuste de 3.7 millones de pesos en el contrato con Comercializadora Aura Imal, que según Attolini, podría incluir sobreprecios en focos y opacidad en el uso de recursos. Sin rodeos, emplazó a la Fiscalía Anticorrupción, cuya titular es la ex diputada Karla Samperio Flores, a investigar este caso y otros que, según él, irán surgiendo como parte del mismo esquema. ¿Llegará luz al asunto o todo quedará en penumbras?

Año de retos

En la jornada de cierre de las comparecencias como parte del análisis del primer informe del gobernador Manolo Jiménez Salinas estuvo en el Congreso del Estado el secretario de Desarrollo Regional de la Laguna, Eduardo Olmos Castro.

Le fue bien en la comparecencia con los legisladores; finalmente, se trata de un funcionario público de colmillo político y mano izquierda.

Lalo Olmos habló de un año de retos para los municipios de la Laguna, que se resolvieron con la presencia permanente del gobierno de Manolo Jiménez.

Olmos no batalló para ubicarse en tiempo y forma en el edificio legislativo; lo conoce a la perfección.

En su comparecencia lo recibieron las diputadas Luz Elena Morales Núñez, presidenta de la Junta de Gobierno, y Olivia Martínez Leyva. Las dos fueron sus compañeras en la pasada legislatura.

Con instinto de guarura

Ahora resulta que Luis Fernando Salazar es el guarura en jefe de la bancada de Morena en el Senado. ¡En algo tendría que destacar el senador coahuilense!

El legislador de Morena justificó su arrebato contra Enrique Vargas, colega del PAN, y aseguró que fue “instinto” lo que lo llevó a defender a su coordinador Adán Augusto López Hernández, como si de guardaespaldas se tratara…

El espectáculo comenzó cuando el panista Mario Humberto Vázquez, acusó al veracruzano Miguel Ángel Yunes Márquez de “darlas” para asegurarle a Morena la Reforma Judicial.

La bancada guinda, encabezada por Adán Augusto, que un día sí y el otro también ofende a sus opositores, esta vez no aguantó y amagó con golpes a integrantes de la bancada panista.

Y justo ahí es donde entró Salazar a la escena: jaloneó a Vargas, mientras defendía a Yunes y al coordinador morenista, Adán Augusto.

El ex panista dijo que no fue violencia, sino lealtad mal entendida. El “instinto de guarura” que lo domina parece ser el nuevo papel del “ex niño azul”.