Saltillo|Monclova|Piedras Negras|Acuña|Carbonífera|TorreónEdición Impresa
Danna está más enamorada que nunca y así celebra a su novio Culpa víctima de “Los Chorros” al gobierno federal Trump llama a votar a cristianos y portadores de armas de fuego La ‘Reina del Sur’ de EU es deportada al país para enfrentar cargos de narcotráfico Debuta Pumas con derrota en la Leagues Cup 2024

Zócalo

|

     

Opinión

|

Información

< Opinión

 

Coahuila

El Costco como fenómeno social; el caso Torreón

Por Luis Carlos Plata

Hace 7 meses

Como pocas sociedades en el país, Torreón quería un Costco. Era un deseo convertido en necesidad vital. Relativo al fin, aunque no por ello menos relevante.

El martes fue colocada la primera piedra de la construcción que no sólo llega a La Laguna, un territorio hasta entonces inexplorado para la franquicia norteamericana, sino que aspira en extensión a ser la tienda más grande de México (entre 41 distribuidas en 21 estados). Un suceso que va de lo grandioso a lo grandote, parafraseando a Jorge Ibargüengoitia.

Si bien existen supermercados desde hace décadas en “la ciudad de los grandes esfuerzos”, el arribo de Costco Wholesale implica una conversión definitiva sin punto de retorno para la región: del comercio en camionetas con melones y sandías apiladas en la caja, producto de una zona eminentemente agrícola desde tiempos inmemoriales, a grandes superficies asépticas con mercancías importadas al por mayor. El culmen de la posmodernidad.

Lo anterior supone ingresar a un modelo de negocio que induce a comprar cantidades que sólo se necesitarían en caso de inminente fusión nuclear, o apocalipsis zombi.

Un concepto que da trato de socios a sus clientes por el simple hecho de portar una membresía que les permite acceder a sus instalaciones, y pagar en sus cajas; una tarjeta de plástico con validez anual que empodera y da estatus social, como si fuese un Club Campestre con muestras gratis o un Casino del consumismo.

No se trata de adquirir víveres a un precio módico que aseguren la mejora en las condiciones de vida, o igualen oportunidades entre estratos; por el contrario, es la experiencia y el proceso de comprar a través de decisiones irracionales, condicionadas por la distribución de los espacios y el acomodo estratégico de los artículos, más cercanas a la programación neurolingüística que a la lógica de mercado.

Es la participación en un ritual para diferenciarse del resto que no puede o no quiere pertenecer al colectivo.

Anteriormente los lugares crecían por estar situados en las rutas de transporte, o bien por estar junto a recursos naturales que animaban a las empresas a implantarse en ellos.

En los tiempos que se viven las urbes se miden y comparan en función de las cadenas internacionales que llegan a ellas para instalarse (otro parámetro, por increíble que parezca, es la velocidad de la conexión móvil que reciben de los proveedores del servicio telefónico). A partir de ahí figuran en el mapa de trascendencia.

Prestar su suelo para que se ubiquen extranjeros, se cree, otorga un ilusorio brillo allende las fronteras ya que se da por descontado entonces que han avanzado suficientes estadios de civilización en un imaginario ranking para considerarse merecedoras del desarrollo.

Bajo esa dinámica, disponer de mercaderías en un mismo lugar, tal como existen en otras latitudes, sustituye al progreso y a las sociedades del conocimiento.

 

Cortita y al pie

Como algunas más en el país, Torreón es otra ciudad que hace del equipo de futbol local su personalidad. Tampoco es algo extraño; en Nuevo León el fenómeno se repite con Tigres y Rayados, pese a tener por epicentro un municipio (área metropolitana, en realidad) con más siglos de historia y por tanto más cultura y manifestaciones artísticas en comparación.

Sin embargo el distanciamiento entre directiva y afición alejó a los fanáticos del Territorio Santos Modelo en los últimos años, y su equipo de beisbol, históricamente perdedor, tendrá que demostrar a posteriori que la temporada 2023 en que llegaron a la final de la Liga Mexicana no fue flor de un día.

En esa circunstancia Costco llega para ocupar una vacante en el ánimo social de los laguneros. No en vano el vicepresidente del corporativo, entrevistado por un medio de la localidad, afirmó que nunca había visto tanta emoción por la instalación de una tienda como en Torreón.

 

 

La última y nos vamos

Mientras eternas demandas como agua potable, drenaje pluvial o transporte intermunicipal siguen sin ser resueltas 116 años después, los pollos rostizados, las afamadas pizzas y los polémicos pasteles llegarán de manera supletoria en 2024. En Torreón vencieron al desierto, pero no a la novedad.

 

Notas Relacionadas

Culpa víctima de “Los Chorros” al gobierno federal

Hace 37 minutos

Ratificados en el IMSS

Hace 4 horas

Paralizarán traileros carretera Saltillo-Monterrey por abusos policiacos en NL

Hace 5 horas

Más sobre esta sección Más en Coahuila

Hace 4 horas

Ratificados en el IMSS

Hace 18 horas

Punto de encuentro: Santo Cristo

Hace 18 horas

Con todo el aval