Ciudad de México.- Quizá uno de los segmentos más infravalorados del mundo automotriz sean las minivanes, sin embargo, solo hace falta un viaje largo a bordo de ellas para convencerte de sus bondades.

Manejo, entretenimiento para toda la familia, una tercera fila donde no es necesario hacer actos de contorsión para sentarse y una cajuela donde cabe el equipaje de todo mundo son solo algunas de sus cartas fuertes.

Y cuando hablamos de minivanes, su creador tiene todo para proponer.

La nueva Chrysler Pacífica se renovó con una silueta de trazos más estilizados que mejoran su aerodinámica, así como una parrilla más grande en forma de diamante y nuevo diseño de luces LED.

En sus poco más de 5 metros de largo tiene todo —tecnología y amenidades— para consentir a la familia. Por primera vez llega FamCam, una cámara que permite monitorear lo que sucede en la segunda y tercera fila de asientos desde la pantalla principal.

Como buena representante de una marca americana, Pacifica tiene todo el lujo necesario para llevar a ocho pasajeros en asientos calefactados, pero sin duda, el conductor es el que recibirá la mayor parte de la diversión, además del equipamiento, el manejo es una de las cartas más fuertes de esta minivan.

Con un motor V6 de casi 300 caballos de potencia, Pacifica es un avión presto a despegar.
La dirección es precisa y bastante menos suave de lo que esperarías de este tipo de vehículos.

Como tenía que ser en un vehículo familiar, Pacifica está repleta de asistencias de seguridad (cuenta con cerca de 100) entre las que se incluyen un frenado automático en caso de emergencia, detección de peatones, asistencias para estacionado autónomo y por supuesto, bolsas de aire para las tres filas de asiento, así como de rodilla y multietapas.

Sus competidoras del segmento también acaban de renovarse y Pacífica se mantiene como la opción más lujosa, equipada y vivaz; pero —si, tiene un pero— las versiones híbridas no llegaron a México con este rediseño, algo que sí ofrece actualmente Toyota con Sienna.