Monterrey, NL.- Al acudir a una diligencia de la Fiscalía General de Nuevo León al Motel Nueva Castilla, Mario Escobar padre de Debanhi aseguró que ya sintió un cambio en el rumbo que llevan las indagatorias.

Tras la intervención de Presidencia y el ofrecimiento de ayuda de otras autoridades federales, Escobar, destaca que hasta su semblante cambio.

“Noto un cambio, sí, noten mi semblante”, afirmó.

“Tengo la esperanza de que esto se va a corregir”.

A las 11:20 horas peritos de la Fiscalía General, Agentes Ministeriales, y Mario Escobar ingresaron al Motel Nueva Castilla acompañados de un plomero para cerrar llaves de paso de agua, gas y apagar algunos minisplits.

Su presencia fue en calidad de testigo, para evitar que se “contaminaran” zonas clave en el caso.

Al concluir la diligencia, que demoró 22 minutos, Escobar habló sobre la posibilidad de una exhumación de los restos de Debanhi y sobre los resultados de dos autopsias.

“Era necesario que otra dependencia federal interviniera en el caso”, dijo.

“De entrada la próxima semana vemos el caso de la necropsia”.

“Si hay necesidad de llegar (a la exhumación), no tenemos ningún problema”, afirmó.

Recalcó sobre su hipótesis en el caso que se indaga sobre la muerte de su hija.

“Lo sostengo, mi hija fue asesinada”, dijo.

Aseguró que no está satisfecho con los resultados ni la forma cómo se han efectuado las indagatorias desde hace más de un mes.

¿Está satisfecho con la investigación?, se le preguntó.

“Todavía no”, respondió.

Aunque señaló que el caso será un parteaguas.