El 20 de noviembre de 1910 don Francisco I. Madero cruzó la frontera desde Eagle Pass, Texas, a la en aquel momento llamada ciudad Porfirio Diaz, ahora Piedras Negras, Coahuila, para dar inicio a la lucha armada en el movimiento revolucionario mexicano.

El sábado pasado, también 20 de noviembre, se cumplieron 111 años de aquella gesta que buscaba liberar de la dictadura al pueblo mexicano. Año con año por todo el país se realizan desfiles conmemorando esa patriótica fecha.

Desde niño, como la mayoría de los mexicanos, he participado en estas magnas ceremonias para rendir honor y pleitesía a los héroes de la Revolución que ofrendaron su vida para que mejorara la nuestra. En este 2021, orgullosa y patrióticamente desfilé de nuevo, pero ahora lo hice a caballo y pasando frente a Palacio Nacional en el Zócalo de la Ciudad de México. Los pormenores de tal evento los relataré en la próxima columna.

En una columna anterior plasmé la singular dedicatoria con la que don Francisco inicia su libro, La Sucesión Presidencial en 1910, y ahora transcribiré los títulos y subtítulos del mismo, donde se manifiestan claramente la esencia y las formas del libro, y en las que lamentable y paradójicamente, el lector acucioso podrá encontrar muchas similitudes entre la situación y circunstancias desfavorables de aquel México de 1910, y el de ahora.

Y además, aunque aparentemente el régimen actual pretendería ser todo lo contrario a su homólogo porfirista, se comporta de la misma manera autocrática que aquel, y quien se sienta en la desquiciadora silla presidencial en este sexenio, se comporta de manera muy parecida a quien la ocupara hace 111 años.

Mi intención en esta columna persiste en aras de despertar a los lectores a leer este libro fundamental para comprender a Madero, a México y a nosotros mismos, los mexicanos.

Madero magistralmente nos lleva de la mano a través de sus textos, por un túnel del tiempo en el que desglosa lo sucedido, no solo en la historia de nuestro país, sino del mundo entero, pero no solo como un historiador que se circunscribe a narrar los hechos, lo hace como un analista crítico, lógico y pragmático, sus reflexiones nos conducen a comprender a Porfirio Díaz y a las razones de su permanencia en el poder, haciendo un análisis social, circunstancial y sicológico muy ilustrativo y enriquecedor.

El libro consta de 120 páginas divididas en la dedicatoria y los móviles que lo han guiaron para escribir este libro, para luego dar paso a siete capítulos, resumen y conclusiones.

Capítulo I. El Militarismo En México. Este segmento relata lo relacionado históricamente a la dominación española; la Guerra de Independencia; la Batalla del Puente de Calderón, entre otros movimientos armados.

Capítulo II. El general Díaz, sus Ambiciones, su Política y Medios de que se ha valido para permanecer en el Poder. Aborda temas como su carácter e ideas fijas del general Díaz.

Capítulo III. El Poder Absoluto. Trata sobre el origen del poder absoluto; situación equivoca de algunos gobiernos latinoamericanos; lo que debe entenderse por poder absoluto y comentarios sobre el término.

Capítulo IV. El Poder Absoluto en México. Describe las pruebas de que existe el poder absoluto en México y consecuencias del poder absoluto en nuestro país.

Capítulo V. ¿A Donde nos Lleva el general Díaz? Presenta una entrevista con Creelman y la continuación del poder absoluto.

Capítulo VI. ¿Estamos Aptos Para La Democracia? Habla sobre si el pueblo mexicano está apto para la democracia.

Capítulo VII. El Partido Antirreeleccionista. Explica las tendencias del partido Antirreleccionista, su programa, campaña electoral y sus consecuencias posibles.

Resumen. Conclusiones. Apéndice de la segunda edición. Objeciones a la Sucesión Presidencial de 1910 y nuestra contestación. Carta del autor al general Díaz. Comentarios. Desprestigio de la Reelección, especialmente la del señor Ramón Corral. Actitud del general Reyes, sus probabilidades de llegar al poder. General Félix Díaz. Consideraciones Generales. Partido Democrático. El pueblo despierta. Esperanzas de redención.

Fin.