Saltillo, Coah.- Ya han pasado más de tres años desde que el transporte urbano recibió la última alza tarifaria, y eso no ha pasado desapercibido por los concesionarios del servicio, quienes han estado presentando diversas solicitudes para un nuevo ajuste.

El secretario General de la CROC, y regidor integrante de la Comisión de Movilidad y Transporte, José Albero Morales Núñez, confirmó que desde 2021 se han hecho llegar las solicitudes al Gobierno Municipal.

“ Sí sé que los urbanos de nosotros han pedido incremento de tarifa desde el año pasado, pero ya no supe en qué quedaron. Todavía están en el tema de ponerse de acuerdo con la modernización, creo que iban a ajustar algunas rutas, algunas fusiones y en eso están”, dijo. 

Recién el servicio intermunicipal entre Saltillo y Ramos Arizpe, que maneja la Subsecretaría de Transportes del Estado, logró un nuevo aumento a sus tarifas; situación que buscan replicar los concesionarios locales, sin éxito hasta el momento.

El regidor presidente de la Comisión de Transporte, Hugo Alberto Rábago Mar, afirmó que las solicitudes de los permisionarios las está analizando directamente la Secretaría del Ayuntamiento, a cargo de Carlos Alberto Estrada Flores.

De acuerdo con información del Instituto Municipal del Transporte, entre 2020 y 2021, seis rutas salieron de circulación por escasez de usuarios, 174 camiones no han logrado regresar a circulación.

De las seis rutas colapsadas, cuatro han regresado con menos unidades en este año, lo que ha generado quejas por parte de los usuarios ante los tiempos de espera; y faltan por regresar las rutas 10 y 9.

Aumentos ligados a modernizaciones

En marzo del 2019 se dio el último un incremento de dos pesos al transporte urbano, el cual sólo fue para la tarifa general y en efectivo; la preferencial para estudiantes y adultos mayores no sufrió cambios, y se ha mantenido en 6 pesos hasta la fecha; mientras que para personas con discapacidad se conserva a cero pesos.

Este incremento se aplicó cinco semanas después que se presentó el proyecto de modernización del servicio colectivo.

Previo a este aumento, se dio uno en enero de 2017, el segundo en la gestión de Isidro López, el cual fue de dos pesos en la tarifa en efectivo, de un peso en la general con tarjeta y de 50 centavos en la preferencial.

En julio de 2015, se registró la primera alza de la administración 2014-2017, y se dio el primer ajuste de la gestión de la mano de un programa de modernización que incluía las cajas comunes, unidades nuevas, chóferes capacitados, cámaras en los camiones e incluso internet en algunas rutas. De esas acciones no queda nada.

En la gestión 2010-2013 solo se dio un ajuste tarifario, que vino con la creación de la “tarifa en efectivo” o “de castigo” –como se le conoció popularmente–, que fue un peso por arriba de la general, pagada con tarjeta de prepago. Esta alza se dio de la mano con el arranque del programa Saltibús, del cual sobrevive el sistema de prepago.