QUÉ TAL AMIGOS Y AMIGAS: deseando que se encuentren gozando y agradeciendo la fiesta de la vida. No todos tienen el privilegio de haber visto la luz del nuevo día.

Este tema me encanta, ya que se trata de sanar el niño o niña interior. Todos y todas fuimos niños, pero no todos tuvieron una feliz e inocente infancia, es decir, se le fue negado por el sufrimiento en sus primeros años, les explico:

Algunos los pusieron a trabajar desde sus primeros años, es increíble, pero la realidad supera la ficción, unos porque la pobreza económica los orilla, otros porque fueron raptados para ello, pedir limosna para la mafia de explotación laboral como sexual. De los crímenes más terribles, el quitar la inocencia en todos los sentidos de un pequeño es lo más abominable, pues dicho esto, imaginen ustedes que estas criaturas ahora son adultos, pero con el niño herido en lo más profundo de su ser, el daño es tal que sus vidas siguen de color gris, su vida es nublado siempre, de ahí la importancia de SANAR EL NIÑO Y NIÑA INTERIOR, y cómo se hace esto, se preguntarán, bueno hay técnicas terapéuticas para ello, y la recomendación es asistir a terapia con un profesional de la salud emocional y mental en este caso.

Pero les comparto una de las técnicas que es muy sanadora:

1.- Vayan por un espejo que esté del tamaño de su rostro más o menos, y en un lugar donde no haya nadie, donde no sean interrumpidos por el ruido o por quienes viven con ustedes, y puedas estar solo con tu niño interior.

2.- Te vas a mirar a los ojos con mucho amor, como si te estuvieras viendo de bebé, con ternura, sin juicios, sin arreglarte el cabello, esto por varios minutos.

3.- Después de estarte viendo con amor y ternura, te empezarás a decir palabras y frases muy hermosas, como puede ser: qué linda eres, eres un ser divino, tienes la más bella mirada, gracias por el esfuerzo de todos estos años, eres un ser de luz, tienes una bella sonrisa, eres inteligente, eres hermoso, eres muy alegre, pero realmente sintiendo lo que te dices.

4.- Empezarás a decirte: merezco todo lo bueno de la vida, de ahora en adelante, no estoy solo, no estoy sola, ahora en el adulto o adulta en el que habito cuida de mí, no debo temer, hay quien me ame y me defienda.

5.- Perdono desde lo más profundo de mi alma a quienes me hicieron daño. No sabían hacerlo de otra manera. A mis padres los perdono, hicieron lo mejor que pudieron, con lo que sabían y tenían para dar. El perdón engrandece a las almas de quien lo otorga.

6.- De hoy en adelante te amaré, te cuidaré como el más amado y preciado ser, mereces lo mejor de la vida, hoy y para siempre cuidaré de ti, ahora el adulto en el que me he convertido será tu protector, te abrazaré a diario por todos los abrazos que no te dieron en su momento, cuando eras niño y no hubo nadie que te defendiera, que te atendiera, que te cuidara, ahora yo cuidaré siempre de ti, ahora y para siempre. Somos uno. Tú, mi niño interior, y yo.

7.- Te abrazas tú mismo por varios minutos, puedes poner música instrumental, o zen, para ayudar a que los sentimientos afloren y sueltes todo ese dolor que puede haber en tu niño o niña interior.

Todos tenemos a ese niño o niña interior, algunos más heridos que otros, otros tal vez pudieron haber tenido una bella y sana infancia, lleno de amor, pero otros no y para ellas es esta técnica.

Después regálale a tu niño o niña interior algo que siempre haya querido, y si no pudieras aun comprárselo, puedes regalarle alguna nieve, algún gusto al paladar, ver alguna película que desde niño o niña le encantaba, con palomitas, refresco de su preferencia, algunas golosinas, apapacha a tu niño o niña interior. Y prométete a ti mismo o a ti misma que jamás de ahora en adelante lo dejaras solo o sola. Que ahora se tienen mutuamente conscientemente, que nadie, ni nada volverá a lastimarlos. Porque ahora el adulto que eres cuidara de ese niño lastimado o lastimada.

Verás que será muy sanadora y bella esta experiencia, regálale, y regálate AMOR PURO Y TIEMPO PARA TU NIÑO INTERIOR.

SI TODOS CUIDÁRAMOS A NUESTROS HIJOS E HIJAS DE NO LASTIMARLOS EN SU INFANCIA COMO PADRES Y MADRES, NO HUBIERA SIDO NECESARIO IMPLEMENTAR TÉCNICAS PARA SANAR EL NIÑO INTERIOR, ESTA ES UNA DE ELLAS, HAY MUCHAS MÁS. Si eres padre o madre de familia aún puedes decirle a tu hijo e hija, que le amas profundamente, que te perdone si los has lastimado. Pregúntale cómo puedes ayudarle para que su vida sea mejor, en el entendido que cada uno busca ser feliz en su interior, pero puedes ayudarle. Primero aprendiendo tú. Y algo muy importante, perdónate a ti mismo, a ti misma si hubieras dañado a tu hijo o hija, pues era lo que tenías para dar, lo que sabías, lo que tenías en esos momentos de la vida, inexperiencia. Mientras allá vida hay la oportunidad de que con el alma en la mano pidas perdón y te perdones.

Feliz día del niño y de la niña. Cuidemos su alma, su mente y cuerpo. Aprendamos primero nosotros a amarnos, solo así podremos amarlos y enseñarles a amarse. Nadie da lo que no tiene.

Recuerda el mejor regalo para un niño o niña, siempre será el amor de sus padres, el respeto y el tiempo de calidad que le dediques. Y claro, un dulce con infinito amor.