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AP
Publicado el martes, 7 de junio del 2011 a las 20:30
Buenos Aires.- Seis aeropuertos permanecían el martes cerrados en Argentina a causa de la gran nube de ceniza emanada por un volcán chileno, mientras que en otros nueve se registraban cancelaciones de vuelos, entre ellos el internacional de Ezeiza, en las afueras de Buenos Aires.
La nube de ceniza que despide el volcán Cordón Caulle avanzó desde el sur del territorio argentino hacia el noroeste y noreste, afectando a las provincias de Mendoza, La Pampa, San Luis, San Juan y Buenos Aires.
Los aeropuertos de Bariloche, Chapelco, Esquel, Trelew y Viedma, situados en las provincias patagónicas de Río Negro, Neuquén y Chubut, y el de Bahía Blanca, en el sur de Buenos Aires, permanecen cerrados, informó la Secretaría de Transporte.
Además “se registran cancelaciones de vuelos” en el aeroparque de Buenos Aires y en el aeropuerto de Ezeiza, en las afueras de la capital, así como en los de las ciudades sureñas de Río Gallegos, Río Grande, Ushuaia y Comodoro Rivadavia y en los de Mendoza, Santa Rosa y San Rafael, localidades situadas en el oeste.
Aerolíneas Argentinas y Austral no operarán en el aeropuerto de la capital argentina y en el de Ezeiza “hasta nuevo aviso”. Al menos cinco compañías internacionales decidieron suspender sus partidas y llegadas desde esa última terminal aérea, entre ellas Delta, American, GOL, TAM y United Airlines, informaron medios de prensa.
LAN informó a su vez que fueron cancelados los vuelos desde el aeroparque metropolitano hacia localidades del norte y el sur argentino y que aguarda un nuevo parte del Servicio Meteorológico para “replantear la actividad el resto del día”.
Aunque la ceniza afectó el tráfico aéreo en la zona metropolitana de Buenos Aires no era perceptible en las calles de la capital y de localidades cercanas.
El titular del Consejo de Emergencias de la provincia de Buenos Aires, Jorge Echarrán, dijo a Radio Provincia que “la nube ya está en la zona del conurbano y llegando a la capital”.
Agregó que “se trata de una nube que pasa entre 5.000, 7.000 metros de altura y que como no contiene la cantidad de partículas que afectó a la zona de Bariloche, no tendremos los inconvenientes que hubo allí”.
La secretaría de Transporte señaló que dado que el volcán seguía este martes “en actividad, no está prevista la reapertura de las terminales aéreas hasta que no estén garantizadas las condiciones de seguridad necesarias”.
Bariloche, a 1.650 kilómetros al sur de la capital argentina y muy afectada por las emanaciones del volcán desde el sábado, sufrió este martes cortes del servicio eléctrico. Otras localidades muy perjudicadas por la caída de ceniza son las turísticas de San Martín de los Andes y Villa Langostura, cerca de la Cordillera de los Andes, y la de Ingeniero Jacobacci.
En tanto, en Chile 25 vuelos de LAN, Aerolíneas Argentinas, Iberia y TAM con destino a Buenos Aires, Lima, Sao Paulo, Montevideo y Europa fueron suspendidos en el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago, donde no hay vestigios de la ceniza.
En el sur chileno se amplió la evacuación de personas que viven en zonas cercanas al cordón volcánico. Las autoridades temen que las fuertes lluvias que se han registrado desde el lunes por la noche puedan aumentar el peligro de desbordes de ríos, en especial en el valle GolGol.
El volcanólogo Jorge Muñoz, del Servicio Nacional de Geología y Minas, informó que es probable que el volcán comience a expeler lava en los próximos días, aunque señaló que la mayor preocupación es el escurrimiento del material piroclástico hacia los ríos de la región.
Dijo que hasta ahora “es una erupción volcánica de carácter moderado” y que la preocupación es que se desate una actividad mayor.
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