Arrancó este jueves la temporada de informes de los legisladores locales del PRI, con el evento que organizó en Torreón el diputado Felipe González Miranda.
En las próximas semanas se esperan eventos similares, por lo menos del tricolor. Habrá qué estar pendientes de los planes que tengan los legisladores del PAN.
En el informe de Felipe González destacó la respuesta a la convocatoria y el mensaje de unidad que se mandó, hacia adentro, pero sobre todo hacia afuera.
Felipe, muy próximo al coordinador de Mejora en Torreón, Hugo Dávila Prado. Como suplente y titular, hacen equipo en el territorio.
Cómo lo adelantamos, el Subsecretario General de Gobierno y Comunicación Institucional, Diego Rodríguez Canales, participó como representante del gobernador Manolo Jiménez y como el evento fue por la tarde, también del dirigente del PRI Coahuila, Carlos Robles Loustaunau.
“Defender el presente y el futuro de Coahuila, es la prioridad”, fue la parte total del mensaje de Rodríguez.
En el informe de Felipe González Miranda coincidieron Luz Elena Morales Núñez, presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso Estatal, y la diputada federal Verónica Martínez, presidenta del PRI Torreón. A la convocatoria se sumaron compañeros de González Miranda, de distintas nomenclaturas.
Desencajado, desubicado y sin rastro de liderazgo vieron este jueves a Román Alberto Cepeda González —“Robán”, como lo apoda el diputado Antonio Attolini— durante su recorrido por Saltillo y Torreón. Primero, en la firma del convenio Mejora junto a los alcaldes; luego, en el informe del diputado Felipe González. Dos escenarios distintos, pero al final, lo mismo: un alcalde perdido.
El zafarrancho en la cúpula de Morena Coahuila sigue al rojo vivo. Mientras Luis Fernando Salazar optó por el clásico “aventar la piedra y esconder la mano”, quien sí entró al ruedo fue la regidora Alejandra Salazar. Pero la verdadera sorpresa llegó con Lupita Mandujano, viuda de Armando Guadiana Tijerina y madre de la senadora Cecilia Guadiana.
Las morenistas se dieron con todo en redes sociales, y protagonizaron un nuevo capítulo en la telenovela de dimes, diretes y clasismo, todo, muy al estilo morenista.
Y en medio del pleito, saltó la joya: según evidenciaron, en Morena las campañas electorales se mueven… ¡a billetazos! como en los mejores tiempos del viejo PRI.
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