La Habana.- El huracán Irma derrumbó árboles, techos y postes del tendido eléctrico con vientos de unos 200 kilómetros por hora, que dañaron hoteles en los centros turísticos más conocidos de la isla, y provocó evacuaciones forzadas en el litoral costero de La Habana.

La electricidad fue cortada para evitar cortocircuitos y el servicio de telefonía celular funcionaba con intermitencia, mientras Irma se acercó al final de su viaje de 320 kilómetros a lo largo de la costa norte de Cuba para luego emprender rumbo hacia Florida.

En el pueblo pesquero de Caibarién, los residentes comenzaron a barrer los escombros caídos de las viviendas afectadas cerca de la playa luego de que las marejadas ocasionadas por la tormenta llevaron aproximadamente un metro de agua del mar hacia la costa.

Mientras el agua bajaba, en las calles se podían apreciar algas verdes que parecían una alfombra. La gente dijo que era el ciclón más potente que jamás había golpeado a la ciudad.

“Las planchas de zinc llegaron volando hasta nuestro patio, dañaron la pared de la cocina y perdimos muchos tejados”, dijo Ángel Coya, de 52 años, quien sostuvo que está optimista de que el gobierno comunista cubano ayudará a reparar los daños.

“Tenemos que seguir adelante”, señaló.

En La Habana, que se preparó para sufrir graves inundaciones, las potentes olas penetraron en las zonas bajas del capitalino barrio de El Vedado.

Al menos 10 mil personas fueron evacuadas por la cercanía de sus casas al mar o por el deterioro de sus viviendas.

El mar se adentró hasta dos manzanas en algunas zonas del histórico paseo marítimo de la ciudad.

Los restaurantes en el paseo cerraron las ventanas y colocaron sacos de arena para frenar el empuje de la tormenta.

Durante la noche del viernes y la madrugada del sábado, Irma golpeó con fuerza varios centros turísticos que se extienden desde la central provincia de Camagüey hasta Villa Clara y se dirigió a Varadero, la playa más famosa de Cuba.

La provincia de Villa Clara, una de las más afectadas junto a Camagüey y Ciego de Ávila, está “totalmente apagada” y su capital, Santa Clara, sufrió daños importantes que aún no han sido cuantificados.

Los Cayos Coco y Guillermo, que forman parte de complejo turístico Jardines del Rey que incluye 16 hoteles frecuentados por canadienses y europeos, sufrieron graves daños, dijeron las autoridades locales.

Al menos un puente clave para acceder a los cayos en Ciego de Ávila se derrumbó y la torre de comunicaciones estaba en el suelo.

“Esta ciudad es hermosa, pero ahora es un desastre”, dijo Sandro Sánchez, un residente local de 27 años, mientras caminaba por una calle principal luego de que Irma pasó por la ciudad de Remedios, en Villa Clara.

Irma causó la muerte de 22 personas en el Caribe y clasifica como una de las tormentas más poderosas que se haya registrado en un siglo.