Saltillo, Coah.- Con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada, Rosa Elvia sabe que nada le regresará a su hijo. Le arrebataron el motor de su vida y ahora sólo le pide a Dios que le dé resignación y fortaleza para seguir adelante.

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Recuerda la angustia que la atrapó cuando se enteró de la balacera en Monterrey y lo primero que hizo fue buscar a su hijo. Le llamó a su celular en varias ocasiones; pero sólo le respondía el buzón de voz.

Ante la nula respuesta, se trasladó con su esposo y su sobrino Andrés a Monterrey. Allí tuvieron que trasladarse al Servicio Médico Forense para reconocer el cuerpo de su hijo y de su amigo.

“Fue inútil la búsqueda el viernes, todo estaba hermético, regresamos a medianoche y a las 6 de la mañana nos volvimos a ir a Monterrey, y ahí en el Tecnológico nos dieron todo el apoyo, nos pusieron un abogado para ir a la Procuraduría y ahí dijeron que nos podían enseñar fotos”, relata la madre.

LA HORRIBLE CONFIRMACIÓN

“Nos dijeron que no eran ellos, porque a los que mataron iban armados hasta los dientes, pero qué injusticia, porque ni siquiera una mochila traían, habían dejado su mochila en el laboratorio donde ellos estaban trabajando, nomás bajaron a comer, les dio hambre y fueron a cenar, en mal momento, digo yo”.

De acuerdo con las declaraciones de las autoridades, los padres se dirigieron al Servicio Médico Forense para rectificar que los cuerpos no eran los de los jóvenes estudiantes.

“Fuimos con la seguridad de que no eran ellos, cuando entró mi esposo a ver salió desfigurado y dijo: ‘Sí son, Rosy; son ellos’”… Eran muy amigos, siempre se apoyaron, desde la carrera”.

SUEÑOS TRUNCADOS

A sus 23 años Jorge tenía la vida por delante y sueños por cumplir. Estaba a tres semanas de graduarse de su maestría en el Tecnológico de Monterrey, misma que cursó durante un año por medio de una beca, gracias a su promedio superior a 95.

Participaba en el grupo de desarrolladores de un proyecto de un auto híbrido solar del Tecnológico de Monterrey, vivía en un departamento ubicado a unas cuadras del campus Monterrey con Javier Arredondo, el otro joven que también murió asesinado.

Con excelente promedio, en 2008 Jorge se graduó de la carrera de Ingeniería Mecatrónica del Tecnológico de Saltillo, junto con Javier, quien se convirtió en uno de sus mejores amigos.

Estudió la primaria en la Escuela Anexa, la secundaria en la Margarita Maza de Juárez y la preparatoria en el Ateneo Fuente, y practicaba gimnasia olímpica desde segundo año de primaria, su sueño era participar algún día en las Olimpiadas.

DIOS REGÍA SU VIDA

No tenía vicios. Le gustaba salir y divertirse; pero no era un muchacho fiestero. Tenía presente la religión en su vida, escuchaba música cristiana y siempre que podía hablaba de Dios. Su comida favorita eran las enchiladas suizas y le encantaba estar con su perro “Mic”.

“Era mi motor, era un muchacho muy bueno, no es porque sea mi hijo, pero era un joven que no se metía con nadie, era muy noble y tranquilo”, dice su madre.

Era el único hijo de Rosa Elvia Alonso y Lorenzo Joel Mercado Medina. Ella maestra y el ingeniero en Electrónica. Andrés Gustavo García Mercado, su primo, fue confidente de Jorge y compañero de múltiples aventuras.

“Él era un muchacho ejemplar, con muy buenas calificaciones, estudioso, reservado, tranquilo, y practicaba mucho deporte”, comenta Andrés.

Luego de egresar del Tecnológico de Saltillo, Jorge trabajó en Sabritas, empresa a la que acudió personal del Tecnológico de Monterrey para ofrecer becas de posgrado, eligiendo al joven por su desempeño y promedio escolar.

Así, llegó a radicar en Monterrey, y entre tareas y la realización de su tesis esporádicamente visitaba Saltillo; pero mantenía comunicación diaria con su familia.

LA DELINCUENCIA NOS QUIERE AMEDRENTAR: RECTOR TEC
El Universal

Rafael Rangel Sostmann, rector del Sistema Tecnológico de Monterrey, informó que el Gobierno estatal se comprometió a esclarecer los hechos en que murieron dos de sus estudiantes al quedar en un fuego cruzado entre militares y narcotraficantes.

“Los delincuentes quieren amedrentarnos; pero no nos vamos a asustar”, afirmó.

Tras sostener una reunión con el gobernador Rodrigo Medina, el rector del ITESM reiteró que las clases siguen y que no se van a asustar.

“Es lo que quiere exactamente el crimen, amedrentarnos, cerrarnos; no nos vamos a cerrar y nosotros vamos a seguir trabajando, con seguridad, con normas, pero vamos a seguir trabajando”, recalcó.

El funcionario de la institución educativa privada se interroga el porqué tardaron tanto en identificar los cuerpos si cada estudiante debe portar su credencial para entrar al campus.

“Yo creo que, bueno, ésa es la cosa, que yo estoy preguntando, lo mismo me he preguntado, dónde quedó la identificación, y por qué me dicen que eran sicarios. Y vamos a suponer que estuvieran relacionados con el crimen organizado, de todas maneras están identificados como alumnos del Tec, ¿por qué me dices que nada tienen qué ver con el Tec? Ésa es mi pregunta”, sostuvo.

“Para mí fue clave que haya gente que pueda atestiguar que los vio (a los estudiantes) esa noche, incluyendo a un profesor muy reconocido, de mi época; para que me entienda, él los conocía muy bien y esa noche estaba trabajando”, añadió.

Rangel se reunió también con los padres de Javier Francisco Arredondo Verdugo, alumno de doctorado y originario de La Paz, Baja California.

PIDEN JUSTICIA A TRAVÉS DE FACEBOOK
Paola Praga

La muerte de Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo se encuentra ya en las redes sociales. A través del grupo de Facebook: Descansen en Paz, Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo, la comunidad universitaria del ITESM pide justicia a las autoridades y exige se aclare el asesinato de los jóvenes fallecidos la madrugada del sábado.

En el grupo se invita a los alumnos a vestirse este lunes de negro, como muestra del duelo a las familias de las víctimas y como forma de rechazo a los hechos violentos que se vienen suscitando en Nuevo León desde hace semanas.

“Es momento de actuar, sin perder el respeto x las familias afectadas, pero no podemos dejarlo sólo como una protesta silenciosa. No podemos quedarnos callados, necesitamos mostrar que no permitiremos y que no deben ni pueden seguir ocurriendo estos hechos tan lamentables. No hay que quedarnos callados, hay que protestar, enfrente de rectoría el lunes desde la mañana, sin perder la cordura ni el respeto”, se lee en algunos de los comentarios escritos por estudiantes del Tecnológico de Monterrey.

CALDERÓN EXPRESA PESAR
El Universal

En un comunicado, el Mandatario manifestó sus condolencias a los familiares y amigos de los dos jóvenes estudiantes, así como a la comunidad estudiantil de la casa de estudios.

Calderón dijo que se unen a la pena que embarga a sus familiares por la pérdida de Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo, caídos en medio de una balacera en Monterrey, Nuevo León.

CALLAN AUTORIDADES MILITARES
Claudia O. Morán

Tanto el comandante de la Sexta Zona Militar, Rubén Serrano, como el representante del Gobierno estatal, Sigfrido Macías, prefirieron no tocar el tema de la muerte del joven saltillense Jorge Antonio Mercado Alonso, asesinado durante un enfrentamiento en Nuevo León.

Serrano Herrera se negó de tajo a hablar de cualquier otro tema que no fuera relacionado al aniversario del natalicio de Benito Juárez, acompañado en todo momento de un guardia personal que portaba un arma larga a su lado.

Macías Pérez, en cambio, inicialmente se excusó de hacer comentarios porque “desconocía” el tema, pero que podría hablar de las próximas elecciones en Juárez y Lamadrid.