Saltillo.- Dos sujetos empistolados a bordo de un vehículo Volkswagen Bora negro pusieron en jaque a las autoridades, durante la madrugada del domingo, luego de herir a dos personas en diferentes hechos al sur de la ciudad.

El primer suceso, ocurrió alrededor de las 0:40 horas al interior del estacionamiento del restaurante denominado Norteño Wings, donde dos comensales que se retiraban del establecimiento a bordo de un Bora negro, chocaron contra un auto de la marca Seat.

El propietario del vehículo afectado de nombre Francisco Urbano Torres, de 29 años, salió a enfrentarlos, exigiéndoles el pago de la reparación de los daños, situación que molestó a los responsables.

El sujeto no identificado descendió del vehículo, y desenfundó una pistola tipo escuadra 9 milímetros, con la cual lesionó a Francisco en la pierna izquierda, para después salir del establecimiento y desde el exterior balear el vehículo Seat.

Testigos de lo sucedido dieron aviso de inmediato al 911, momento en el que los tripulantes del Bora emprendieron la huida, perdiéndose entre calles del sector para escapar de la policía.

Minutos más tarde se recibió una llamada al 911, en la que una mujer mencionaba haber sido agredida a balazos por dos sujetos, cuando circulaba de norte a sur sobre periférico, a la altura de la colonia Hidalgo.

Choca por alcance auto de pistoleros

Sayra Martínez indicó que viajaba en compañía de su pareja a bordo de un Ford Focus, cuando sobre el puente del bulevar J. Mery un vehículo Volkswagen Bora los impactó por alcance.

Ambos conductores se orillaron y cuando se disponían a conversar el responsable desenfundó una pistola y la detonó en varias ocasiones en contra del vehículo, provocando que la pareja pisara el acelerador a fondo para escapar de las balas.

Mientras escapaban de los pistoleros, Sayra llamó al 911 y relató lo sucedido, sin embargo, al retornarse sobre periférico encontraron varias unidades que tomaban conocimiento de un accidente, y ahí pidieron auxilio.

La mujer presentaba una herida de bala en el hombro derecho, mientras que la unidad tenía huellas de proyectiles en varios vidrios y en la carrocería, por lo que fue asegurada.

Sayra se trasladó por sus propios medios a un hospital, en tanto agentes de la Fiscalía tomaron conocimiento de lo sucedido y orientaron al afectado para que acuda a interponer la denuncia correspondiente.

Pese a los rondines que realizaron en los alrededores de los lugares donde se suscitaron las agresiones, las autoridades no lograron ubicar el vehículo que ya es rastreado mediante las cámaras urbanas.