Saltillo, Coah.- La ciudad se ha vuelto una pista de carreras para motociclistas que, sin casco, sin la vestimenta adecuada y sin respeto a las señales de tránsito, terminan siendo protagonistas de choques y tragedias mortales.

Por eso, es urgente capacitar a jóvenes y adultos que suben a más personas de las permitidas o apenas están aprendiendo a conducir, y una estrategia es concientizando a los niños para que digan “no” ante el uso irresponsable de motos por parte de sus padres o familiares.

Durante la clausura del “Kids summer camp” de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad Autónoma de Coahuila, se realizó una charla para que los pequeños de 4 a 12 años de edad, sepan lo que se debe y no se debe hacer al usar una motocicleta.

“ Estamos tratando de promover un motociclismo responsable dentro de la comunidad, y nos interesa que desde niños aprendan lo que es ser un motociclista responsable, debido a la alta tasa de accidentes que ha habido aquí en la ciudad”, explicó Víctor Alfonso Gómez, de la Confederación Internacional de Motociclistas, Oficiales y Policías de Caminos A.C.

“ Por eso empezamos con esta actividad con niños desde chiquitos, que vayan aprendiendo lo que es la seguridad, que deben de usar casco, guantes, que no le hagan caso si llega el tío con la moto y le dice ‘así súbete’, no, no es algo correcto, y tratamos de evitar accidentes”, recalcó, “espero que si podemos hacer que 2 o 3 de los 130 niños que tuvimos hoy nos hace caso, con eso nos damos por bien servidos”.

Los pequeños, en su mayoría procedentes de colonias populares, se sorprendieron con maniobras ejecutadas por los motociclistas, quienes usaron el equipo completo para usar estos vehículos de forma segura, porque muchos manejan en chanclas, short y manga corta.

“ Tratamos de cubrir todo ese tipo de aspectos para que los niños vayan haciendo un poco de conciencia, les decimos no le hagan caso, si su papá llegó y les dijo ‘usted súbase, somos cinco y cabemos’, trata de evitarlo, tratar de crear esa conciencia”, agregó Alfonso Gómez.

Vasti Salazar, coordinadora general del campamento de verano, explicó que los niños son muy receptivos, y que aprenden bien a través del juego.

“ Durante estos 9 días ellos tuvieron diferentes actividades que fortalecen su desarrollo individual, social, tuvimos actividades artísticas, culturales, deportivas; tuvimos también niños de escasos recursos que fueron becados por parte de nuestros patrocinadores”, expresó.