Ciudad de México.- En menos de cinco años, las marcas de autos chinos avanzaron aceleradamente en México y de tener 22% de participación del total de los vehículos ligeros importados en 2021, en los primeros cinco meses del 2025 alcanzaron 57%, de acuerdo a un análisis de S&P Global y S&P Global Mobility.

Este impulso se ha dado principalmente por BYD, que en 2024 representó 11% de las importaciones totales de vehículos ligeros, pero de enero a mayo de este año llegó al 30%, desplazando a GM en el segmento de importaciones, que pasó de 36% a 29% en el mismo periodo.

La pérdida de mercado de GM ha sido notoria, ya que en 2021 sus importaciones fueron 73% del total que México trajo del exterior, pero con el avance de las chinas se ha ido reduciendo su participación.

Sin embargo, en el análisis Aranceles Mexicanos: Un Freno a la Expansión Internacional de las Automotrices Chinas, S&P Global explica que esa medida pudiera tener un impacto, si bien moderado, pues las empresas asiáticas podrían comenzar a ver erosionada su ventaja de costos, por lo que tendrían que empezar a considerar elevar sus inversiones en el desarrollo de cadenas de suministro en los países en los que están llegando.

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Las exportaciones de automóviles de China a México alcanzaron las 322 mil unidades en los primeros siete meses del 2025, según datos de la Aduana de China. Esto representa aproximadamente el 8% de las exportaciones totales de automóviles de China.

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Aunque esto sólo equivale a 1.8 de la producción total de automóviles de China, el aumento de los aranceles de 20% al 50% reducirá el volumen de ventas o erosionará su rentabilidad en un mercado donde los precios competitivos son una ventaja”, abundó.

A principios de este mes, el Gobierno de México anunció una propuesta de aranceles para productos chinos, prevista en el Paquete Económico 2026, que incluye tasas de hasta 50% para autos ligeros.

Actualmente más de 10 fabricantes chinos han establecido presencia en México, principalmente vía exportaciones, y en conjunto tienen entre 13% y 14% del mercado mexicano de vehículos ligeros, que incluye la producción nacional y los importados.

Aranceles arreciarán competencia

La propuesta de aumentar los aranceles a vehículos fabricados en China divide a la industria automotriz, pero traerá consecuencias para los consumidores mexicanos. 

Los autos hechos en ese país, tanto de marcas chinas como de estadunidenses y otras que desde ahí exportan hacia México, representan 18.5% del total de los vehículos que se comercializaron en el país entre enero y agosto, según cifras de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).

Tan sólo las ventas de marcas chinas significan 8.2% del total en el mismo periodo. 

A decir de Eugenio Grande, director de Electro Movilidad Asociación (EMA), el restringir el acceso de vehículos a México encarecerá la transición a la electromovilidad, restará competitividad al mercado y retrasará la adopción de estas tecnologías.

Para Eric Ramírez, CEO de la consultora Urban Science, si bien es cierto que la democratización de los vehículos eléctricos e híbridos fue gracias a la entrada de autos fabricados en China, lo cierto es que la agresividad de las marcas de ese país empezó a provocar la guerra de precios.

Refirió que si BYD decidiera incrementar el precio de su modelo más vendido, el Song Plus, en 30%, los mexicanos mejor buscarían otras opciones en marcas como Toyota, Ford o Chevrolet.