Saltillo, Coah.– Los niños que presentan sobrepeso y obesidad, mantendrán la misma condición en el 40 por ciento de los casos en la juventud y edad adulta, lo que traerá daños a su salud a edades más tempranas y afectará su esperanza y calidad de vida, informó Luis Ervey Chacón Garza, profesor investigador de la Escuela Ciencias de la Salud, de la Universidad Autónoma de Coahuila.

“ Ahorita, desgraciadamente estamos viendo que sí es un porcentaje elevado, aproximadamente un 40 por ciento de ellos pudiera no llegar a salir de él. Aquí habría que tomar en cuenta algunos factores, cuando tenemos al niño con obesidad, tenemos que ver también a sus padres; si sus padres ya presentan el problema y el niño lo está presentando, es muy probable que ese problema persista”.

“Si ya en su familia tienen malos hábitos que le han transmitido a él, y en el 90 por ciento de los casos es así, es difícil para el niño salir del problema”. Así, serán candidatos a desarrollar enfermedades crónico-degenerativas a temprana edad.

“ Hasta hace algunos años, en los 90’s todavía del siglo pasado, era muy común que los médicos estuvieran acostumbrados a tratar por ejemplo la diabetes tipo 2 en adultos; en el siglo actual, nosotros estamos viendo que cada vez es más común que se lleguen a diagnosticar estas enfermedades en la infancia”.

El doctor en Ciencia y Tecnología de los Alimentos explicó que desde finales de los 90’s empezaron a cambiar los hábitos de alimentación en Coahuila y otros estados del norte del país, influenciados por la cultura de Estados Unidos, proliferaron los establecimientos de venta de comida rápida, con muchos alimentos ultraprocesados e hipercalóricos.

“ Es considerada una pandemia prácticamente a nivel mundial, nada más que la gente no le presta mucha atención porque como los efectos no son visibles directamente por las personas, más allá de ver a la persona con sobrepeso. No se da cuenta uno de que ellos tienen hipertensión o diabetes o alguna otra enfermedad acompañada crónica a lo largo del desarrollo de la obesidad”.

“Muchas de las personas con obesidad pueden tener otras enfermedades, por ejemplo, hígado graso, pero como no se ve, la gente no le presta mucha atención, muchas veces es el estereotipo de la persona con obesidad, pero sí es muy grave”.

El exceso de masa corporal puede detonar dislipidemias, desequilibrio en los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, problemas cardiovasculares que pueden terminar con infartos.

“ Además, por ejemplo, las consecuencias de la diabetes, que serían problemas renales, la pérdida de la vista, las amputaciones a largo plazo, cuando las enfermedades se descontrolan”.

Coahuila es de los estados con mayores índices de obesidad y sobrepeso y México se ubica entre los primeros cinco países con esas enfermedades a nivel mundial.

Destacó que el crecimiento económico se refleja en mayor poder adquisitivo de las familias en Coahuila, el problema es que no procuran una alimentación saludable, sino que prefieren comprar pollo frito, hamburguesas, pizzas, frituras y galletas, antojos que dañan la salud y recortan la esperanza de vida.