Negocios
Por Agencia Reforma
Publicado el sábado, 15 de mayo del 2021 a las 03:00
Ciudad de México.- El próximo campo de batalla entre China y Estados Unidos estará en las plantas de manufactura de vehículos eléctricos, y México jugará un papel estratégico en este enfrentamiento.
En marzo pasado, el Gobierno del Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que se destinarían 174 mil millones de dólares para impulsar la adopción de vehículos eléctricos y la creación de una red con 500 mil estaciones de recarga a lo largo del país.
Con incentivos como créditos fiscales para personas y empresas, así como reembolsos, la Administración estadunidense busca empujar la transición de los vehículos de combustión a los impulsados por baterías, una carrera en la que la delantera se encuentra dominada por China, donde, de acuerdo con la consultora IHS Markit, se concentrará 44% del mercado en 2021, frente al 16% que, se proyecta, reunirá Estados Unidos.
Conforme en Estados Unidos la oferta de vehículos a baterías es impulsada, la industria de manufactura automotriz en México comienza su transición a este tipo de motorizaciones.
Ford ya fabrica su Mustang Mach-E en la planta de Cuautitlán, Estado de México, donde también se producirá otro vehículo electrificado, y General Motors anunció una inversión de mil millones de dólares para el complejo de Ramos Arizpe, Coahuila, para que albergue el ensamble de un eléctrico en 2023, así como la manufactura de baterías y componentes a partir de este mismo año.
La llegada de la producción de más modelos de este tipo supondrá un proceso de adaptación de algunas de las firmas de la industria de autopartes que se dedican a componentes de motores de combustión.
México es actualmente el quinto productor de componentes automotrices en el mundo y el séptimo en producción de vehículos ligeros; de acuerdo con cifras del Clúster Automotriz de Guanajuato (Claugto), ya existen 40 empresas que maquilan piezas para vehículos eléctricos que se exportan a Estados Unidos.
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México tiene 24 ensambladoras y la mayoría de las marcas que existen en el mundo de fabricación de autopartes, 99%, ya está en México”, explica Alfredo Arzola, director del Claugto.
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Va a haber un efecto cascada enfocado en las marcas que ya tenemos que probablemente vamos a ver expandirse o reconvertirse, lo que ya está sucediendo”.
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