Hemos atravesado una pandemia. Todos hemos sido trastocados física y emocionalmente por sus consecuencias, y de la misma manera nuestros niños. A ellos les ha tocado atravesar un camino adaptativo y nos han demostrado la resiliencia que son capaces de adquirir ante las dificultades.

Y aún con toda la revolución interior que ellos suelen vivir dentro de su infancia, hoy les toca un retorno escolar distinto y aún incierto.

Las vacaciones nos permitieron evadir un poco la realidad escolar en pandemia, pero ahora, ¿Cómo le hacemos como padres para reducir la ansiedad en nosotros y en ellos como niños? ¿Cómo gestiono de manera asertiva todo el remolino emocional que sucede interiormente en mi familia?

Lo primero que hemos de hacer como padres es verbalizar todo lo que estamos sintiendo. ¿Tengo angustia por la separación? ¿Vivirán la sana distancia? ¿Y si no se lava las manos? ¿Y si se abrazan? ¿Y si …? Hemos de darle salida a todos esos miedos. Escríbelos, háblalos y suéltalos. Hemos de darle salida a las emociones incompletas para poder acomodar los pensamientos y darles forma asertivamente.

Dándole salida a la ansiedad, podremos pensar más clara y asertivamente.

¿Qué funciona para mi? ¿Qué es lo mejor para mi familia? ¿Qué es lo mejor para este hijo? Déjate de comparar con la familia vecina y enfócate en tus prioridades y necesidades cómo familia. Cada quien lo está haciendo lo mejor que puede, con los recursos que tiene, y eso está bien. Recuerda que haz dado lo mejor de ti y haz hecho tu mayor esfuerzo. No te regreses, para y enfócate en cómo quieres vivir a partir de hoy, y llénate de esa confianza de que estás haciendo lo correcto en el tiempo correcto. Esto es lo que te toca vivir en este momento, y lo estás haciendo lo mejor que puedes.

Sé que hay mucho por hacer pero, recuerda hacer un alto y parar para mirar de adentro hacia fuera. Cuidar la salud emocional es igual de importante que cuidar la salud física. Esta ansiedad es normal y natural. Si solemos tener ansiedad cómo papás al inicio de un nuevo ciclo escolar por cómo se integrará, quienes serán sus nuevos amigos, el cambio de escuela, el cambio de maestro, el cambio de rutina… ahora la ansiedad será mayor por la pandemia y porque hemos vivido una dinámica distinta en familia, más apegados que nunca.

Karen Stewart, psiquiatra, afirma que el año nuevo escolar puede ser estresante y más para los que viven una transición de escuela. Stewart recomienda seis consejos para reducir la ansiedad del regreso a clases…

Reconoce sus preocupaciones y estrés, lo que le angustia. Asegúrate de hacerle sentir que es normal estar nervioso y actúa con confianza.
Habla sobre los posibles problemas y preséntale alternativas de solución.
Refuérzale sus fortalezas y talentos. Anímale y recuérdale lo que a el le gusta de la escuela o cuáles son las clases que más le gustaría tener.
Busca integrar la rutina lo antes posible, sobre todo en el horario de sueño y alimentación. Recuerda que la rutina siempre genera seguridad.
La primera semana, enfócate en elogiarlos, ser organizada, apoyar en lo que se requiere o se haya olvidado y ser flexible. Y lo más importante: mucho apapacho, mucho abrazo, mucho te amo.

No pases por alto cada momento que pueda servir de apoyo para reconectarte con tus hijos. Recuerda que cada situación es una oportunidad para enfrentar sus miedos. La autoestima y la confianza de los hijos, depende mucho de la apertura y actitud de los padres; al buscar acompañarlos en buscar las soluciones y avanzar en las situaciones de crisis. Hoy quisiera invitarte a tomar ventaja de este nuevo ciclo para reconectarte con tus hijos y empoderarlos. Si te es imposible decírselos en persona, escríbeselos en un cuaderno o alguna nota en su lunch.

Para niños pequeños: Te amo; Soy feliz de ser tu mamá; Me encanta como eres; Eres valioso; Yo quisiera tener un amigo como tu.

Para niños más grandes y adolescentes…

“Da lo major de ti en cada clase y recuerda que el éxito se trata de sentirse orgulloso de hacer nuestro mayor esfuerzo.”

“La única persona que puede limitarte en este mundo eres tu mismo. Las decisiones que tomas hoy forjan tu mañana. Comienza a construir tus sueños poniendo todo tu empeño.”

Te mereces lo mejor, sueña alto y no te conformes con menos.

No te rindas, el esfuerzo le da valor a las cosas. Da lo mejor de ti.

“Lo más sorprendente de la educación, es que te permite enterarte de cosas que ni siquiera sabías que existían. Vive esta aventura con alegría.”

“La educación es la llave que abre la puerta a la posibilidad de elegir quién quieres y qué quieres hacer en la vida. Aprovecha cada segundo de tu día.”

“Después de la vida el mejor regalo que puedo darte es tu formación y educación. Todo lo demás pierde valor con el tiempo, mientras esto te sigue enriqueciendo por siempre.”

Te amo, estoy orgulloso de quien eres y eres suficiente para mi.

Toma ventaja de cada momento en familia para recordarles tu amor y ser afectivo con tus hijos. A cualquier edad, los hijos necesitan sentirse queridos y eso intrínsecamente les mueve a aspirar más. Recuerda ser paciente con cada uno de tus hijos y reflexionar que cada uno responde de acuerdo a su personalidad. Observa las expectativas que te creas de cada uno de tus hijos y reflexiona sobre tu plan de educar a cada uno. Muy probablemente las estrategias que utilizas con uno no funcionan con el otro. La clave para una infancia integral es permitirles a los hijos avanzar en sus propios retos, acompañándoles estando cercanos.