Saltillo, Coahuila.- La tecnología del vehículo autónomo ya está y es una realidad, innovación en el que las grandes armadoras deben subirse, ante la inminente llegada del futuro de la movilidad donde la limitante ya no es un tema de tecnología, dijo Bruno Juanes, directivo de Estrategia y Operaciones de Deloitte Consulting Group.

Existen varios parámetros para definir su operación como los tipos de áreas ya sea rural, urbana, y de la propiedad del vehículo, propio o compartido, con costos de transportación por kilómetro. Dependiendo de estos factores irá moviéndose más rápido.

“Creemos que en un futuro cercano, la preponderancia será para el vehículo autónomo, incluso sin propiedad del conductor… La movilidad será un servicio, no una propiedad”, adelantó.

Recordó que estos días se anunció la compra de MobileLite por 15.3 billones de dólares por parte de Intel. Se trata de una startup israelita que provee al 100% de los OIM sus sistemas de conducción autónoma.

Esta tecnología ya funciona perfectamente lo mismo en las grandes carreteras, terracerías o los caminos cubiertos de nieve.

La compañía OTTO que acaba de adquirir Uber, movieron la primera unidad con latas de cerveza hasta el centro de distribución.