Internacional
Publicado el domingo, 14 de septiembre del 2025 a las 20:04
Geogia, E.U. — La redada migratoria masiva en una fábrica de Hyundai en el sureste de Georgia, en la que casi 500 trabajadores fueron detenidos, ha desatado una crisis humanitaria en la región. Organizaciones no lucrativas reportan un aumento de llamadas de auxilio de familias asustadas que han perdido a sus seres queridos y su sustento económico.
Rosie Harrison, directora de la organización Grow Initiative, afirmó que, desde el operativo, las familias de bajos ingresos, tanto inmigrantes como no inmigrantes, “experimentan un nuevo nivel de crisis”.
La mayoría de los 475 detenidos en la redada, considerada la más grande en dos décadas, eran surcoreanos que ya han sido deportados. Sin embargo, un gran número de trabajadores de otras nacionalidades, como mexicanos, guatemaltecos y venezolanos, permanecen en un limbo legal.
” Hay personas que llaman todos los días, pero la lista no termina”, lamentó Harrison.
La redada, llevada a cabo por agentes de ICE, provocó escenas de caos. Los trabajadores que lograron escapar se escondieron en conductos de aire y hasta en un estanque de aguas residuales.
Vanessa Contreras, portavoz de la organización Migrant Equity Southeast, relató que recibieron llamadas frenéticas de familiares que no podían localizar a sus seres queridos.
Abogados y defensores que representan a los trabajadores detenidos afirman que, a pesar de la retórica de la administración Trump contra los inmigrantes “criminales”, muchos de los arrestados tenían autorización legal para trabajar en el país.
El abogado Charles Kuck citó el caso de dos clientes que contaban con el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), y uno de ellos ya fue liberado.
El impacto de la redada se ha sentido con fuerza en las comunidades locales. Muchas familias han quedado sin su único sostén económico y están desesperadas por conseguir recursos básicos como alimentos y leche de fórmula para sus bebés.
Rosie Harrison señaló que la mayoría de las familias que la han contactado no comprenden por qué sus seres queridos fueron detenidos, ya que contaban con permisos de trabajo legales.
” Las peores llamadas telefónicas son aquellas en las que se oye a los niños llorar y gritar, ‘¿Dónde está mi mamá?’”, concluyó.
Notas Relacionadas
Hace 11 horas
Hace 1 dia
Hace 2 dias
Más sobre esta sección Más en Internacional
Hace 8 horas
Hace 8 horas
Hace 9 horas
Hace 9 horas
Hace 9 horas
Hace 9 horas
Hace 9 horas
Hace 10 horas
Hace 11 horas
Hace 11 horas
Hace 11 horas
Hace 11 horas